La OTAN no decidirá sobre Ucrania hasta después de su reunión del miércoles con Rusia

Después de una reunión de emergencia de los ministros de Asuntos Exteriores aliados, en los que los debates se centraron en el papel de Rusia en Ucrania y Kazajistán, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg , resumió como conclusión que la organización cree que «las acciones agresivas de Moscú socavan seriamente el orden de la seguridad en Europa», pero al mismo tiempo espera poder reducir las tensiones en la reunión del Consejo OTAN-Rusia que se ha convocado para el día 12. «La OTAN –dijo Stoltenberg– sigue comprometida con nuestro enfoque de doble vía hacia Rusia, compuesto por una robusta política de disuasión y defensa, combinada con una oferta significativa de diálogo» y en este sentido «consideramos que es una señal positiva de que Rusia ahora está preparada para sentarse a la mesa y hablar porque cuando las tensiones son altas, el diálogo es aún más importante».

«Siempre estamos dispuestos a escuchar las preocupaciones de Rusia y la OTAN hará todo lo posible para encontrar una vía política, pero para que el diálogo sea útil, también debe abordar las preocupaciones de los Aliados sobre las acciones de Rusia. Debe basarse en los principios fundamentales de la seguridad europea y debe realizarse en consulta con Ucrania». Stoltenberg ha mencionado también las consultas de la OTAN con Georgia y Moldavia, dos países cuyo acercamiento a la OTAN irrita a Moscú, y con la Unión Europea, para referirse a dos países como Finlandia y Suecia, que no forman parte de la OTAN aunque la política rusa puede hacer que cambien de opinión.

Los ministros han hablado esencialmente de las posibles sanciones que podrían ser aplicadas en caso de que Rusia llevase a cabo una operación agresiva contra Ucrania . La intervención en Kazajistán tiene otro tipo de connotaciones, teniendo en cuenta que este país mantenía hasta ahora unas relaciones constructivas con la OTANy formaba parte del «selecto grupo de socios» con los que la alianza había iniciado un proceso de estandarización de sus infraestructuras militares para facilizar su interoperatibilidad con los sistemas occidentales. La reunión ha sido por teleconferencia, igual que la que tienen previsto celebrar los jefes de Estado Mayor la semana que viene.

Por otro lado, el Alto Representante de la Política Exterior europea, Josep Borrell, publicó una serie de extraños mensajes en redes sociales en los que aseguraba que la UE está dispuesta a «apoyar la desescalada» en Kazajistán, después de reconocer que había llamado al ministro de Exteriores kazajo, Mukhtar Tileuberdi, que forma parte de un régimen que ha ordenado disparar a matar contra los manifestantes. «He sido informado de la situación por el ministro de Kazajistán Tileuberdi al que expresé la disposición de la UE a apoyar la desescalada. Continuaremos siguiendo de cerca la situación. Es importante que se garanticen los derechos y la seguridad de los civiles». En cuanto a la asistencia militar rusa, Borrell dijo en otro mensaje que le traía «recuerdos de otra época que deben evitarse».

Borrell acaba de regresar de una visita oficial de dos días a Ucrania, donde ha sido el primer representante oficial de la UE que se desplaza a la zona del frente en las regiones orientales del país, donde se mantiene el conflicto alentado por Moscú.