El gobierno del conservador austriaco, Sebastian Kurz, se tambalea por las acusaciones de corrupción

El canciller austriaco rechazó todas las acusaciones de haber destinado dinero público a manipular la información de un medio de comunicación a cambio de la compra de espacios publicitarios

Protesta contra el canciller austriaco Sebastian Kurz Reuters

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La investigación abierta por la Fiscalía Económica y de Corrupción austriaca (WKSTA) contra el canciller Sebastian Kurz , otros nueve sospechosos y tres organizaciones, desestabilizó ayer la coalición de conservadores y verdes que gobierna en Austria. Kurz rechazó todas las acusaciones de haber destinado dinero público a manipular la información de un medio de comunicación a cambio de la compra de espacios publicitarios, y confió en que sus socios de gobierno verdes mantuviesen sus compromisos.

«Con la mejor voluntad del mundo, no puedo imaginar ninguna otra cosa», dijo al respecto pocas horas después de que los fiscales llevasen a cabo registros en la sede del Ministerio de Finanazas y en oficinas de su partido, el conservador ÖVP. En un principio, el vicecanciller y líder de Los Verdes, Werner Kogler garantizó efectivamente que «estas revelaciones no alteran nuestro trabajo conjunto», pero a medida que transcurrían las horas fue debilitándose el nexo entre los dos partidos y quedó planteada una auténtica crisis de gobierno.

Kogler efectuó una declaración a primera hora de la tarde en la que anunciaba la apertura de conversaciones por parte de su partido con las demás formaciones políticas con representación parlamentaria. Estas conversaciones comenzarán hoy y tantearán la posibilidad de formar otra coalición de gobierno.

Papel de los verdes

«Las conversaciones han sido acordadas con todos los partidos y me complace que todas las partes estén dispuestas a este tipo de deliberaciones sin reservas», dijo, «en una situación así, es necesario estar a la altura, mostrar respeto y confianza». El líder del partido de extrema derecha FPÖ, Herbert Klickl, retó a Los Verdes a decir por anticipado y públicamente si de verdad están dispuestos a gobernar con ellos, pero por el momento no obtuvo respuesta.

Apenas se conocían estos planes de la oposición, se produjo una movilización de organizaciones regionales del conservador Partido Popular (ÖVP) . Los presidentes regionales acudieron a Viena para una reunión de crisis con la dirección en torno a Sebastian Kurz, que acudió a entrevistarse con el presidente de Austria, el verde Alexander van der Bellen, y declaró que «nosotros, como ÖVP, estamos preparados para cualquier escenario».

Al cierre de esta edición, habían decidido establecer también contactos con el resto de partidos para comenzar a explorar una coalición alternativa mientras Kurz insistía en rechazar «al mil por cien» todas las acusaciones y hablaba de «una acusación construida a base de extractos de SMS descontextualizados, se ha creado un dosier delictivo en torno a ellos y, en todo caso, yo no escribí ningún SMS y considero que se trata de acusaciones inventadas». «El hecho de que las encuestas fueran manipuladas es de partida absurdo porque decenas de encuestas publicadas en muchos otros medios en el período en cuestión arrojaron valores muy similares», añadió.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación