Los fiscales alemanes tienen «alguna evidencia» de que Madeleine está muerta

Hans Christian Wolters, portavoz de la fiscalía de Braunschweig, ha dicho que su oficina tiene ya «alguna evidencia» de que Madeleine McCann está muerta, pero que están pidiendo colaboración ciudadana para obtener mayor carga probatoria y poder sentar ante un tribunal con mayores garantías al sospechoso Christian Brückner , que actualmente cumple ya condena de siete años en la prisión de Kiel por la violación de una mujer estadounidense de 72 años en 2005. La investigación sobre la desaparición de Madeleine en Praia da Luz, Portugal, ha sido reabierta al encadenar los investigadores varios delitos cometidos por el mismo ciudadano alemán de 43 años y tener constancia de que estuvo en el mismo lugar y a la misma hora en que despareció la niña. Se le investiga por sospecha de asesinato como única hipótesis de la desaparición y «solo falta orientación para poder encontrar sus restos».

Brückner vivió en la costa del Algarve y su teléfono móvil portugués recibió una llamada de media hora en Praia da Luz alrededor de una hora antes de que Madeleine desapareciese, el 3 de mayo de 2007. «Contamos con que está muerta, pero no tenemos pruebas suficientes para que podamos obtener una orden de detención en Alemania por el asesinato de Madeleine McCann ni suficientes pruebas para un juicio en la corte, aunque sí tenemos algunas pruebas de que el sospechoso ha cometido el crimen», ha dicho Wolters a la cadena británica de televisión Sky News, donde ha dado publicidad al caso esperando que algún turista inglés pueda todavía recordar algún detalle. La policía alemana ofrece una recompensa de 10.000 euros por cualquier dato que conduzca a relacionar a Christian Brückner con el destino de la niña.

«Es por eso que necesitamos más información de la gente, especialmente de los lugares donde ha vivido el sospechoso, para que podamos acotar y buscar allí a Madeleine». Wolters ha pedido a los turistas británicos que visitaron Praia da Luz entre 1995 y 2007, cuando se cree que el sospechoso vivía en el área, que presentaran cualquier información o detalle que recuerden sobre el hombre, por insignificante que les parezca y aunque en aquel momento no le diesen ni la más mínima importancia.

Mientras tanto, los fiscales alemanes siguen examinando cualquier vínculo con la desaparición de otros dos niños, y Wolters cree que hay más víctimas de delitos sexuales relacionados con el mismo sospechoso y que nunca han sido denunciados.