El envite de Salvini en Emilia Romaña pone ante el abismo a Roma
La Liga y sus aliados insisten en que si ganan las elecciones en esta región hegémonica de la izquierda pedirán que se convoquen comicios generales
Sopla muy fuerte el viento de la derecha en toda Italia. Pero es probable que no sea suficiente para empujar al líder de la Liga, Matteo Salvini , a lograr uno de sus sueños: ganar las elecciones regionales de Emilia Romaña , trascendentales para el futuro de la política italiana. Algunos sondeos a pie de urna, antes de la clausura de los colegios, daban ganador con una ligera ventaja al candidato de la izquierda, Stefano, Bonacini, del Partido Democrático (PD). Los colegios electorales se mantienen abiertos desde las 7 de la mañana hasta las 11 de la noche para elegir al presidente de cada una de las dos regiones y su asamblea regional. Fueron llamados a las urnas cinco millones de italianos (3.515.000 electores en Emilia Romaña y 1.960.000 en Calabria). El porcentaje de votación ha sido muy superior a las expectativas, lo que indica el interés que han despertado, sobre todo en Emilia Romagna, porque tanto la derecha como la izquierda se han movilizado desde hace meses.
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El clima político era de gran expectación e incertidumbre, porque este domingo se ha librado una singular batalla con disputa hasta el último voto entre la derecha y la izquierda en esa importante región del norte, Emilia Romaña, feudo «rojo» desde 1970. Durante medio siglo ha sido gobernada con éxito por la izquierda y el centro izquierda, y está entre las regiones más ricas de Italia. Aquí lleva haciendo campaña desde hace meses el líder de la Liga, Matteo Salvini , con el objetivo de derribar esa fortaleza de la izquierda. Son comicios regionales, pero se les da un valor nacional, porque sin duda tendrán repercusión en el Gobierno de Roma. Incluso el exministro del Interior Salvini las ha planteado como si se tratara de un referéndum sobre su liderazgo. Se celebraron también elecciones en Calabria , al sur del país. Pero mientras en Emilia Romagna la incertidumbre sobre el voto se ha mantenido hasta el final, en Calabria la victoria de la derecha se da por hecha.
Alto consenso de Salvini
El porcentaje de votos de la Liga se ha mantenido alto (alrededor del 31 % en los sondeos a nivel nacional) desde que Salvini fracasó en agosto pasado en su intento por convocar elecciones generales para hacerse con el poder, un fracaso que lo echó del Gobierno. Los analistas consideran que Salvini ha exagerado en su extremismo durante la campaña, después de haber intentado dar una imagen más moderada inmediatamente después de salir del Ejecutivo. Con sus aliados, Fratelli d’Italia (11 % a nivel regional) y Forza Italia de Berlusconi (7%), el líder de la Liga se ha mostrado siempre convencido de su victoria en Emilia Romaña. La propaganda de Salvini ha sido tan intensa, con mucho dinero y sin escatimar medios, que ha anulado por completo a la candidata de su partido, Lucia Borgonzoni, que ha pasado desapercibida. Salvini, como ya hizo en otras ocasiones, ni siquiera ha respetado el silencio electoral durante el domingo. Ha hecho campaña en las redes sociales, tanto en Twitter como en Facebook, donde ha publicado un video de propaganda con este mensaje principal: « El tren pasa hoy , después no pasa nunca más. Debemos difundir el mensaje “hoy voto Liga”». En realidad, la ley no impide la propaganda en las redes sociales, pero las líneas maestras de la Autoridad para las Garantías en las Comunicaciones (AGCOM) recomienda respetar el silencio en todos los medios de difusión.
Salvini y sus aliados han señalado que si ganan las elecciones en Emilia Romaña pedirán el lunes que se convoquen comicios generales, porque el Parlamento actual no representa la realidad política del país. El primer ministro Giuseppe Conte , que encabeza la coalición formada por el Partido Democrático y el Movimiento 5 Estrellas, además de Italia Viva de Matteo Renzi, responde que, sea cual sea el resultado, nada cambiará porque cuentan con la mayoría para seguir gobernando. En cualquier caso, una victoria de Salvini terminaría por debilitar aún más al ya frágil Gobierno Conte. Si la Liga no se hace con el poder en Emilia Romaña, será un varapalo para Salvini porque habrá perdido un referéndum. Podrá decir, eso sí, que hizo temblar a la izquierda después de medio siglo de gobierno «rojo» en Emilia Romaña.