Una británica de origen iraní condenada por espionaje queda en libertad tras cinco años en prisión

La mujer enfrenta una nueva vista judicial convocada para el próximo domingo por nuevos cargos de propaganda contra la República Islámica por participar en 2009 en una manifestación frente a la Embajada británica en Londres

La trabajadora humanitaria posa para una foto tras ser liberada en Teherán Reuters

Ep

La ciudadana británico-iraní Nazanin Zaghari-Ratcliffe ha sido puesta en libertad este sábado en Irán tras cumplirse los cinco años en prisión a los que fue condenada por cargos de conspiración y espionaje, aunque tiene pendiente otro proceso judicial. Ella niega los cargos.

El abogado de Zaghari-Ratcliffe, Hojjat Kermani, ha explicado en declaraciones a la agencia de noticias iraní ISNA que su representada ya no lleva la tobillera que limitaba sus movimientos a 300 metros de la casa de sus padres.

La salida de Zaghari-Ratcliffe de Irán podría sin embargo verse frustrada por una nueva vista judicial convocada para el próximo domingo por nuevos cargos de propaganda contra la República Islámica por participar en 2009 en una manifestación frente a la Embajada británica en Londres y realizar declaraciones al servicio en persa de la BBC, ha apuntado el marido de Zaghari-Ratcliffe, Richard Ratcliffe. Desde 2017 se lleva especulando con la presentación de nuevos cargos , pero hasta ahora no se habían materializado.

El marido de Zaghari-Ratcliffe ha indicado que con la retirada de la tobillera «han cerrado una anomalía legal». «Le han quitado la tobillera para cerrar el primer caso y evitar medidas formales de Reino Unido, pero volverá al tribunal la semana próxima y le pondrán otra, así que sigue siendo moneda de cambio», ha explicado. Ha relatado además que Zaghari-Ratcliffe ha podido visitar hoy a su abuela y tiene previsto visitar a la familia de una de sus compañeras de celda y a la esposa de otro preso británico.

«Celebramos la retirada de la tobillera de Nazanin Zaghari-Ratcliffe, pero el tratamiento al que le está sometiendo continuamente Irán es intolerable», ha apuntado por su parte el ministro de Asuntos Exteriores británico, Dominic Raab , a través de un mensaje en Twitter.

Zaghari-Ratcliffe, de 42 años y colaboradora de la Thomson Reuters Foundation, fue detenida en el aeropuerto de Teherán en 2016 cuando se disponía a embarcar rumbo a Reino Unido junto a su hija tras una visita a su familia en Teherán. Después de un juicio cuestionado por las organizaciones defensoras de los Derechos Humanos, fue condenada a cinco años de cárcel. Richard Ratcliffe y su hija Gabriella, de seis años ya, esperan poder recibirla en su hogar del norte de Londres. La niña «tiene un calendario en el que va tachando los días», ha relatado Ratcliffe a la agencia de noticias británica PA.

Zaghari-Ratcliffe fue excarcelada en primavera de 2020 debido al riesgo de coronavirus por una decisión del líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, pero ha seguido bajo arresto domiciliario en casa de sus padres en Teherán. El Gobierno británico ha pedido reiteradamente su liberación y considera que su encarcelamiento es «arbitrario» y una «represalia diplomática». En concreto, se ha especulado con que la detención de Zaghari-Ratcliffe estaría vinculada con la petición de Irán de reembolso de los fondos abonados a Reino Unido por la compra de carros de combate Chieftain antes de la Revolución Islámica de 1979 y que nunca fueron entregados, unos 450 millones de euros.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación