Turquía ve la mano de Estado Islámico en el atentado de Ankara
Identificado uno de los posibles suicidas, un varón de entre 25 y 30 años. El brutal ataque del sábado, con al menos 95 muertos, guarda similitud con el del pasado julio en la ciudad de Suruc
El mayor acto de terror en la historia de Turquía : al menos 95 personas murieron el sábado, según las últimas cifras oficiales, y 246 resultaron heridas (48 de ellas permanecen todavía en cuidados intensivos) en un atentado perpetrado presuntamente por los yihadistas de Estado Islámico (EI) durante una marcha por la paz en el centro de Ankara .
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Las primeras investigaciones en curso apuntan a Estado Islámico como responsable de la masacre, de acuerdo con fuentes de seguridad turcas citadas por distintos medios. Una de las fuentes ha revelado que la tragedia del sábado guarda mucha similitud con un ataque suicida sucedido el pasado 20 de julio en la ciudad turca de Suruc , en el que murieron 33 personas, la mayoría de ellos activistas kurdos .«Este ataque es del estilo del de Suruc, todo indica que es una copia del mismo», ha afirmado desde el anonimato una de las fuentes, mientras que otra corrobora que la pista principal es EI. La Policía turca añade además que el explosivo empleado, TNT reforzado con bolas de acero , es parecido al que se utilizó en Suruc.
Posibles responsables
A pesar de que el sábado por la tarde el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu , nombró cuáles eran las cuatro posibles organizaciones que poseían los medios necesarios para realizar una matanza de este calibre, –el Partido de Trabajadores del Kurdistán (PKK), Estado Islámico (EI), y dos pequeños grupos de la ultraizquierda turca, el Frente Revolucionario por la Liberación del Pueblo (DHKP-C) y el Partido Comunista Marxista-Leninista (MLKP) – , lo cierto es que el Gobierno turco empieza a reconocer que la teoría más plausible sea la de los islamistas radicales.
A pesar de que sigue sin haber ninguna confirmación oficial, el diario progubernamental «Yeni Safak», aseguró incluso este domingo en sus páginas que tras el análisis de restos humanos uno de los suicidas habría sido identificado por las autoridades como un varón de entre 25 y 30 años .
El ataque puede envenenar el escenario preelectoral
El brutal atentado de Ankara puede envenenar ahora el volátil escenario político reinante antes de las elecciones del 1 de noviembre y dificultar aún más las relaciones entre el Gobierno turco y los grupos kurdos, algunos de ellos muy implicados en la marcha del sábado. El copresidente del prokurdo Partido Democrático de los Pueblos ( HDP), Selahattin Dimirtas , culpa al Gobierno de forma directa y señala que el atentado forma parte de una misma campaña en la que grupos kurdos ya fueron atacados anteriormente en las ciudades de Diyarbakir en junio y Suruc en julio. Algunas voces han criticado igualmente la falta de medidas de seguridad en el lugar del atentado, algo extraño en Turquía durante la celebración de actos políticos. Pero el ministro de Interior, Selami Altinok , justificó la ausencia de policía explicando que el mitin iba a tener lugar en la plaza de Sihhiye, a dos kilómetros de la estación central de tren.
Las dos explosiones se produjeron a las diez de la mañana del sábado en las inmediaciones de la estación de ferrocarril de la capital turca donde se congregaban cientos de seguidores del HDP. La marcha pacífica, organizada por grupos de izquierda y kurdos , tenía como finalidad protestar contra los cientos de muertos provocados por el reinicio del conflicto entre el Estado turco y el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en el sureste del país.
Arrecian las protestas
Miles de personas se han reunido este domingo en el centro de Ankara para recordar a las víctimas del mortal atentado, pero los enfrentamientos no han tardado en producirse cuando los agentes no permitieron el paso a las delegaciones de varias agrupaciones políticas y cívicas. El HDP, una de las fuerzas más representadas en la marcha del sábado, ha emitido un comunicado denunciando el ataque de la Policía a sus miembros al intentar dejar flores en el lugar del atentado. Algunos de los asistentes han llamado asesinos al presidente Erdogan y a la Policía mientras los antidisturbios dispersaban a la multitud empleando cañones de agua y gases lacrimógenos.