La FIFAcometió cometió dos errores en la elección de las sedes mundiales: Brasil y Catar. «El sistema de rotación de las sedes hizo que Brasil fuera el único candidato en 2014 por parte de Sudamérica y, así, cuando vino la elección de 2022, sólo quedaban dos continentes para elegir: Asia o Norteamérica. Fue tal error que esa norma ya no existe». Así lo asegura Harold Mayne-Nicholls, expresidente de la Federación chilena y miembro la directiva del máximo organismo del fútbol hasta 2012, en una entrevista en Grada360.com
El chileno considera que muchos miembros de FIFA habían decidido su voto antes de leer sus informes basándose «en otros aspectos que no eran deportivos», y que lo sucedido en la Confederaciones es una advertencia. «El Mundial de Brasil va a pagar las consecuencias del sistema de rotaciones. Se postuló a organizar la Copa del Mundo sin otro país que le opusiera resistencia», lo que a su juicio le permitió pasar por alto «algunos puntos clave» para un evento así. «Eso ha traído esta suma de diferencias entre lo que pide FIFA y lo que está dispuesto a otorgar Brasil. Terminó reflejándose en la molestia de la gente. Brasil 2014 va a ser una tremendo desafío para todos: jugadores, países, para la FIFA…Lo que ha sucedido con la Confederaciones ha sido una llamada de atención».
Además, entró a analizar el polémico Mundial Catar 2022, que podría jugarse en otras fechas distintas a las habituales por el calor, aunque descarta que sea en los meses previos a Navidad. «Yo siempre pensé que la querían hacer en enero –explica Mayne-Nicholls–, porque se podrían parar los torneos antes de las fechas navideñas. Los equipos se prepararían para jugar del 10 de enero al 10 de febrero, cuando hay muchas ligas en el mundo que entonces están suspendidas por las bajas temperaturas, como la competición rusa y todas las escandinavas. En Sudamérica hay muchas ligas que están en su período de verano. Me parecía que era más práctico moverlo al periodo de enero-febrero, pero me dijeron que no, que estban pensando en noviembre-diciembre».
Recuerda que «siempre» ha defendido «que prime el fútbol por encima de otros aspectos como los comerciales». «Catar dijo que tenía un sistema para enfriar las canchas, las tribunas y los centros de entrenamiento. ¿Pero si el sistema falla? El riesgo es pasar en el medio del entrenamiento de España de 20 grados a 35 en tres minutos», desveló el dirigente chileno. Por eso, abogó por cambiar el horario y que se jugara «a las seis de la tarde, a las nueve de la noche, y a las once de la noche de Catar». «No están acostumbrados a jugar a medianoche, pero seguro de que prefieren eso antes que jugar con el sol encima, porque eso va a ser durísimo. En el verano catarí a veces ni se puede caminar», aclara. Por último, Mayne-Nicholls ve que las decisiones están tardando demasiado: «Es una resolución cerrada ya, y hay que trabajar en base a las decisiones tomadas. Catar ha ido evolucionando, pero no hemos solucionado estos problemas mayores y no queda tanto».