El italiano Giovanni Visconti (Movistar) ganó este miércoles ante un numeroso público en Vicenza la 17ª etapa del Giro, tres días después de imponerse en el Galibier. Su compatriota Vincenzo Nibali (Astana) conserva la ‘maglia rosa’ de líder de la clasificación general, con un minuto y 26 segundos de ventaja sobre el segundo, el australiano Cadel Evans (BMC).
Visconti apretó en la subida del final de la etapa, a unos 20 kilómetros de la llegada, hasta quedarse solo en cabeza e imponerse en la meta. El siciliano cruzó la línea de llegada con unos segundos de ventaja sobre un primer ‘grupetto’, en el que se encontraban Nibali y sus rivales directos. «¡No puedo creerlo, el Galibier me hizo resucitar!», exclamó el tricampeón de Italia (2007, 2010 y 2011) al bajarse de su bicicleta.
El lituano Ramunas Navardauskas fue segundo en la etapa, por delante del esloveno Luka Mezgec y el italiano Filippo Pozzato, el ‘regional’ del día. En una etapa plana con salida en Caravaggio, de 214 kilómetros y bajo un cielo clemente, el Movistar controló a distancia a los escapados del día, el colombiano Miguel Rubiano, los belgas Maxim Belkov y Gert Dockx y el australiano Luke Durbridge, que se fugaron poco después de la salida. La ventaja de los cuatro aventureros nunca superó los cinco minutos, y se redujo a uno a 30 kilómetros de meta, gracias a la colaboración del equipo Argos.
En el puerto de cuarta categoría situado a 16 kilómetros de la meta, Rubiano, último superviviente de la escapada del día, fue alcanzado y adelantado por Visconti, que había contraatacado pegado a la rueda de su compatriota Danilo Di Luca. El ‘sprinter’ británico Mark Cavendish cruzó la meta a un minuto del grupo principal. Visconti, de 30 años, logra su segundo éxito en tres días, tras su triunfo el domingo en el Galibier, entre los campos nevados, a 2.301 metros de altura.
Esta jueves se disputará la 18ª etapa, una contrarreloj con subidas y bajadas con un recorrido de 20,6 kilómetros en los altos de Rovereto, entre Mori y Polsa. La escalada, considerada de segunda categoría, tiene un desnivel de unos 1.000 metros, con una pendiente media del 5-2% y una máxima del 10%. Precisamente, el líder Nibali se refirió a la misma. «Me defiendo bastante bien en este tipo de contrarreloj (...) Aunque cada carrera es diferente», señaló quien escoltara a Alberto Contador (luego descalificado) en una etapa similar en Nevegal en el Giro de 2011.