Elena Tablada aclara por qué pudo ir a la polémica boda de su cuñada

La celebración de la boda de Jaime Navarro y Beatriz Ungría, cuñada de Elena Tablada, en el Casino de Madrid se ha convertido, por sorpresa, en uno de los temas más comentados en las redes sociales. Un breve vídeo los invitados celebrando, sin moverse de sus asientos, la entrada de los contrayentes al salón nupcial, ha generado una gran controversia al entender que los allí presentes no cumplieron con las medidas de seguridad impuestas para frenar la expansión del coronavirus.

Fuentes consultadas por este periódico aclaran que, en contra de lo que podría parecer por las imágenes difundidas, se cumplieron con todos los protocolos y los aforos marcados por ley para eventos de estas características. En este caso hubo menos de cincuenta invitados, mesas de cuatro comensales y se realizó la correspondiente higenización del local. Así mismo, se defienden, se permitió la entrada únicamente con la confirmación previa de no ser portador del virus: «Se nos hizo PCR a todos los invitados y solo pudimos acudir los que tuvimos resultado negativo, se cumplió con todas las normativas», dice Elena Tablada , cuñada de la novia, ante el revuelo ocasionado.

La empresaria, que vio morir a su abuela por culpa del Covid, es escrupulosa y ha dado siempre muestras de total responsabilidad ante la pandemia. Así las cosas, apela al sentido común para explicar que ninguno de los invitados puso en riesgo su salud ni la del resto de los ciudadanos. En este sentido, el chef Paco Roncero , responsable del catering servido durante la celebración, confirma que se respetaron las medidas de seguridad: «Nosotros cumplimos absolutamente con todas las normas», explica en conversación con ABC. Una afirmación que apoya la versión de los convidados que, si bien entienden que las imágenes pueden crear cierta confusión , insisten en que no se vulneró la normativa vigente en la Comunidad de Madrid.