El 40-45% de los accidentados como Schumacher fallecen precozmente
La segunda rueda de prensa de los doctores del hospital universitario de Grenoble ha levantado el optimismo acerca de la situación de Michael Schumacher: la condición del heptacampeón ha mejorado ligeramente, después de haberle sometido a una segunda intervención.
Así lo confirmaron los médicos que están tratando al ex piloto de Fórmula 1, esta vez con una ligera -ligerísima- sonrisa en su rostro, pero dejando claro que la condición de Schumacher sigue siendo muy grave. El 'káiser' fue intervenido quirúrgicamente durante la noche del lunes al martes después de que un TAC mostrara una leve mejoría que invitó a los médicos a atreverse a operarle. Con esta segunda e imprevista intervención, le redujeron la presión intracraneal, que era el principal problema que tenía el piloto durante las primeras 24 horas.
“Una vez realizado el TAC, el resultado de la imagen no era tan negativo en comparación con los TAC previos a la intervención quirúrgica. De forma conjunta, todos los facultativos propusimos una nueva estrategia terapéutica que implicaba la evacuación del hematoma. Con el consentimiento de la familia, entramos en la sala de operaciones y se lo evacuamos”, resumió uno de los galenos ante los medios. Hasta aquí, las buenas noticias. Las malas llegaron a continuación: le han detectado nuevas lesiones cerebrales.
Se ha ganado tiempo
Los doctores no han querido lanzar las campanas al vuelo. La leve mejoría del estado de Michael Schumacher no implica que su vida no corra peligro aún, dada la gravedad de su accidente. “Estamos en una situación levemente mejor, pero no podemos decir que esté fuera de peligro. Estamos ganando tiempo”, afirmaron.
El tratamiento al que está siendo sometido Michael Schumacher ya ha dado sus primeros frutos. El heptacampeón seguirá en coma farmacológico y en hipotermia inducida hasta que los médicos lo estimen oportuno, para así controlar posibles nuevas complicaciones. No obstante, los primeros resultados han llegado antes de tiempo. “Anoche nos sorprendió el resultado del TAC”, confesó uno de los doctores, que recalcó que, visto el resultado, consultó con el resto de facultativos y con toda la familia sobre la posibilidad de hacer una segunda intervención. Los Schumacher dieron su visto bueno y los neurocirujanos se pusieron manos a la obra.
El problema es que, mientras que confirmaban que se había reducido la presión intracraneal, le encontraban nuevas lesiones por las que “no se puede hacer nada”. “Había hematomas por todo el cerebro, y todavía hay muchas hemorragias cerebrales”. El que le pudieron evacuar fue el más accesible, a la izquierda del cerebro.
A la espera de novedades
El profesor Payen, que es quien ha llevado el peso específico de la rueda de prensa, ha sido muy claro en sus palabras: “Hemos ganado tiempo. La condición de Michael Schumacher sigue siendo grave”. Las nuevas noticias invitan al optimismo, pero con moderación. De hecho, aunque le han preguntado sobre si ya se podría trasladar a Schumacher a otro hospital, en Alemania, ha sido muy claro: se quedará en Grenoble hasta que esté totalmente fuera de peligro y estable. Además, en caso de que consigan salvar la vida del piloto, los facultativos no se atreven a pronosticar posibles secuelas. Ahora mismo, lo principal es que Michael salga de esta con vida.
La evolución de Schumacher marcará próximas comunicaciones. El equipo médico ha dicho que no pueden establecer una agenda de ruedas de prensa diarias, ya que no saben con certeza cómo progresará el estado del heptacampeón. Lo que sí han señalado es que, cualquier cambio, será informado puntualmente a los medios de comunicación.
Esta leve mejoría es un soplo de esperanza para los aficionados del 'kaiser', que se han volcado con el heptacampeón. Además de las muestras públicas de cariño de personalidades tanto del deporte del motor como de fuera de él, los fans de a pie están totalmente pendientes de cualquier información que llegue de Grenoble. En las puertas del propio hospital se está empezando a ver una suerte de 'campamento esperanza' en el que muchos aficionados al motor, con colores de Ferrari fundamentalmente, están mandando su energía positiva para la recuperación del piloto que les ha hecho vibrar. No obstante, y como han dicho los médicos, se ha ganado tiempo, pero aún es pronto.