No fue cosa de magia, sino de buen trabajo y suerte. Así lo reconoció el propio Fernando Alonso, que aunque admitió que cuajó una gran actuación, también señaló que en Ferrari tuvieron una importante dosis de fortuna. «Es una sensación rara», explicó el piloto español, que sumó su sexto podio en Silverstone. «Hemos reducido la distancia respecto a Vettel, pero hemos visto que el ritmo no es suficientemente bueno. Hemos recuperado, pero sabemos que nos queda mucho trabajo por hacer. Tengo confianza en el equipo. Estamos muy unidos y, aunque hemos tenido un fin de semana difícil, hemos puesto la cruz y vamos a por el siguiente», comentó el asturiano, muy satisfecho por el botín obtenido en una carrera loca.
La prueba de Gran Bretaña dejó a Alonso segundo en la clasificación general del Mundial, lo que le permite ser razonablemente optimista. «Ha sido una buena carrera para nosotros. Con el segundo coche de seguridad hemos perdido seis posiciones, pero con todo hemos tenido mucha suerte, especialmente considerando los problemas de neumáticos que han tenido otros pilotos», admitía el asturiano, que se sobresaltó al ver cómo reventaba el neumático trasero izquierdo de Pérez ante sus narices. «Me llevé un buen susto, pero logré evitar el contacto por un centímetro en una carrera en la que hemos visto momentos muy arriesgados, pero en la que finalmente todo ha salido muy bien para mí», admitió.