El otro duro golpe familiar que marcó la vida de Alessandro Lequio

El pasado miércoles 13 de mayo perdía la vida a los 27 años Álex Lequio , hijo de Ana Obregón y Alessandro Lequio , tras varios años de lucha contra el cáncer. Tras dos tratamientos inicial en Nueva York y Nueva Jersey, y otro posterior, a su regreso a España en Navarra, el joven se había trasladado a Barcelona con sus padres hacía unas semanas para comenzar un nuevo tratamiento que, finalmente, no pudo con la enfermedad.

Durante todo este proceso , el joven empresario no dejó de trabajar casi en ningún momento, aunque hubo alguna ocasión en que su estado de salud le impidió llevar a cabo algún compromiso profesional, tal y como él mismo reconoció. Eso sí, su inquietud profesional no le impidió nunca pasar tiempo de calidad con los suyos, su familia, que le acompañaron hasta el último momento. Mantenía una cercana relación con sus padres quienes, a su vez, se apoyaron mutuamente durante el tiempo que duró la lucha de su retoño, así como lo están haciendo ahora.

Este ha sido sin duda el golpe más duro de sus vidas , pero Alessandro Lequio sufrió una traumática pérdida cuando era todavía un niño. Tal y como recoge Ruth Baza en el libro «La Dolce Vita de Alessandro Lequio», y recuerdan en «Vanitatis», a los 11 años el aristócrata perdió a su padre, Clemente Lequio di Assaba , cuando se precipitó por el balcón del jardín de su casa, desde una altura de unos cinco metros, donde se encontraba colocando unas hiedras. Todo sucedió en el año 1971, cuando su progenitor tenía 45 años.

Su madre, Sandra Torlonia y Borbón , hija de la infanta Beatriz (tía del Rey Don Juan Carlos ), y de Alessandro Torlonia ) falleció a los 78 años en la Nochevieja del año 2014. Tan solo unas semanas antes, el 5 de diciembre moría también, a los 77 años, el hermano de Sandra, y tío de Alessandro, Marco Torlonia .

Ana Obregón también sufrió la muerte de un ser querido tan joven hace unos años. El 3 de diciembre de 1989 fallecía el jugador de baloncesto Fernando Martín Espina en un trágico accidente de tráfico . La colisión segó la vida de un jugador cuya leyenda, del todo inolvidable, podría haberse agrandado ya que aún estaba en los mejores años de su carrera . Tenía 27 años, una temporada de experiencia en NBA, y con su juego el Real Madrid era dominante en todas las canchas de España. En aquel momento, el deportista mantenía una relación sentimental con la actriz, quien quedó destrozada tras el fallecimiento del «gran amor de su vida», tal y como ella ha reconocido en numerosas ocasiones.