Omar Montes, tras el altercado del centro comercial: «¿Qué clase de autopromoción es que me llamen asesino?»

Rocío F. de Buján

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04/01/2021
Actualizado a las 16:31h.

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El pasado fin de semana, Omar Montes (32 años) volvía a protagonizar otra polémica relacionada con el incumplimiento de las medidas de seguridad sanitarias para combatir el coronavirus, la única novedad fue que esta vez el altercado tuvo lugar en el Centro Comercial La Cañada de Marbella, (en la Costa del Sol de Málaga).

El cantante se disfrazó de uno de los tres Reyes Magos junto a Kiko Rivera (36) y el televisivo Luis Rollán (44). En el espectáculo también participó Fani Carbajo (34), famosa por su participación en «La isla de las Tentaciones», como la «Estrella de Oriente». Pese a que la organización aseguró días antes que se trataría de un evento privado, sin público y difundido a través de las redes sociales, finalmente no salió como esperaban. Hasta tal punto que la Policía Local y Nacional se vio obligada a intervenir.

El reclamo de su popularidad provocó una auténtica avalancha de gente que superaba con creces el aforo permitido en estos tiempos de pandemia, tal y como se puede ver a través de decenas de vídeos y fotografías compartidas en las redes sociales. Los invitados vip han llegado incluso a ser acusados de «contribuir y prestarse a cometer un atentado contra la salud pública».

«Yo estaba tan tranquilo con mi hijo en Madrid y decidí hacer un viaje de 5 o 6 horas en coche para ir a Marbella para participar en un evento solidario repartiendo regalos a los niños disfrazado de Rey Mago», se justifica el cantante a través de conversación telefónica con ABC. «Si hubiese sabido la que se iba a liar no habría ido porque vivo con mi abuela que por su edad (70 años) es población de riesgo y yo mismo me he expuesto mucho porque soy asmático», aunque «ya me he hecho una PCR» para pasar tranquilo el resto de las fiestas en familia.

Desde que comenzó la pandemia y debido a su trabajo para con el público, Omar Montes se ha sometido a unas «20 0 30 PCR». «Siempre estoy muy expuesto y vivo con mi familia, por lo que necesito hacerme las pruebas aunque duelan», confiesa. «Gracias a Dios ninguno ha dado positivo en coronavirus».

Horas más tarde del altercado, tanto el Ayuntamiento como el centro comercial enviaron sendos comunicados en los que afirmaban que los asistentes se habían descontrolado por el ansia de ver a estos «ídolos», que previamente habían anunciado su presencia en Marbella en las redes sociales a sus miles de seguidores. «Al principio estaba todo bien, eran pocas personas y se cumplían las medidas de seguridad . El problema fue que se expandió la voz de que estábamos allí y la gente que estaba de compras por el centro comercial se amontonó en masa para vernos ». Y aunque «no me gusta señalar a nadie porque no soy un chivato», Omar Montes no entiende por qué le culpan a él de lo sucedido: «Yo no organizaba la seguridad del evento».

A pesar de todas las críticas, el cantante no se va a detener y piensa seguir haciendo felices a los niños. «Antes de Reyes voy a visitar todos los hospitales que pueda en Madrid, haciéndome una PCR antes de entrar, para repartir regalos entre los niños con cáncer», sentencia.

Esta no es la primera vez que el rapero protagoniza una polémica de este tipo. El pasado verano, el artista vio como Marenostrum Fuengirola cancelaba su actuación «por no ponerse mascarilla» en un acto benéfico previo. También en noviembre, en el número 13 de Villa Marina en Nueva Andalucía, Omar asistió a una fiesta con más de 40 «influencers» de Instagram o TikTok que fue desalojada por la Policía . Tras el revuelo, los organizadores aseguraron que Omar Montes no estaba en la fiesta en el momento del desalojo.

Se ha especulado que el cantante protagoniza este tipo de polémicas para autopromocionarse, unos rumores que niega tajantemente. «¿Qué clase de promoción es que me llamen asesino? No sé por qué lo pagan conmigo cuando lo único que hago son cosas de forma desinteresada», y añade: «Pero como diría mi abuela: 'Al perro más flaco, las pulgas más gordas'».

Sin duda, el mayor perjudicado del evento fue Kiko Rivera. Al hijo de Isabel Pantoja no solo se le situó en el ojo del huracán por portagonizar la polémida avalancha de personas junto a su excuñado Omar Montes, Luis Rollán y Fani Carbajo. También su disfraz de Rey Mago originó una oleada de chistes y burlas en forma de «memes» a través de las redes sociales.

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