Marta López, novia de Kiko Matamoros, se confiesa sobre su vida sexual
La modelo, muy celosa de su vida privada, habla por primera vez sobre este tema
Este ha sido un año convulso para Kiko Matamoros . El televisivo comenzó una relación con Cristina Pujol al tiempo que gestionaba la formalización del divorcio de Makoke . Una relación fugaz que duró apenas 3 meses pero en la que hubo tiempo para hacer planes de boda. No obstante, el padre de Anita Matamoros ponía punto y final a su breve e intenso romance y, esa misma semana, salían a la luz unas fotografías en las que parecía que el colaborador había pasado página. En ellas aparecía con una misteriosa joven que pronto fue identificada como Marta López Álamo , modelo, «influecer» y aspirante, por entonces, a Miss World Spain.
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La polémica estaba servida, sobre todo por la gran diferencia de edad entre ambos: ella tiene 23 años y él 63. No obstante, la pareja se empeña en demostrar que lo suyo va en serio, y las declaraciones del colaborador no hacen sino demostrarlo. Así, Matamoros, que estaba viviendo en un hotel por 8.000 euros al mes, en el que Marta se había instalado con él, ha decidió mudarse junto a ella a un inmueble en el centro de Madrid, donde pasan la cuarentena juntos. El colaborador hablaba, incluso, sobre boda e hijos con su actual pareja.
Si embargo, y a pesar de su papel como personaje público, Marta ha intentado mantenerse al margen de las polémicas de Matamoros, y, de hecho, decidió cerrar su canal de «Mtmad» para no verse obligada a hablar sobre su relación con él. Ahora, no obstante, la joven se ha sincerado sobre numerosos detalles de su vida sexual sobre los que se han interesado sus seguidores.
Entre muchas de las preguntas que le han hecho, ha confesado que ha recibido, y sigue recibiendo, criticas diarias por haber empezado una relación con él. Cuenta, además, que nunca ha sido «pillada» manteniendo sexo con su pareja y que no es muy partidaria de utilizar el conocido «satisfyer»: « Prefiero el método tradicional ». Yendo un paso más allá, explica que ha fingido durante las relaciones sexuales en alguna ocasión, y matizaba entre risas: «Para que se acabase, no para satisfacer a nadie».
