Ivanka Trump cierra su marca de moda

Es la niña de sus ojos, pero la guerra es la guerra. Donald Trump se la tiene declarada a medio mundo en su obsesión por equilibrar la balanza comercial de Estados Unidos y uno de sus principales enemigos es China , país al que ayer calificó de « mezquin o » por los aranceles aplicados a los productos agrícolas estadounidenses. Los chinos apuntan con tino. Saben que ese sector aupó a Trump en la presidencia. Además, lo que hacen es responder al fuego tarifario con el que el presidente ha gravado los productos importados del mismo país en el que, en gran medida, se fabrican los productos de su hija Ivanka.

Ivanka Trump ha anunciado que echa el cierre a su negocio. Empezó en 2007 con una línea de joyería fina y después amplió a zapatos, ropa y gafas. Un negocio lucrativo que consistía, básicamente, en poner su nombre a productos made in China. Solo en los primeros meses desde que Trump ganara las elecciones, los registros de aduanas apuntaron hasta 80 cargamentos de material fabricado en China para la marca Ivanka Trump, incluidas 23 toneladas de zapatos, una contradicción en toda regla de la campaña que llevó a su padre a la Casa Blanca . « Make America Great Again » se traduce en un nacionalismo nostálgico y, en términos prácticos, en producción y consumo nacional. Esta misma semana, el presidente participó en una exhibición de productos hechos en Estados Unidos.

Las razones oficiales del cierre de la línea Ivanka Trump están vinculadas al compromiso que adquirió como asesora de su padre en la Casa Blanca (no solo ella, también su marido Jared Kushner forman parte del equipo del presidente). «Después de 17 meses en Washington, no sé cuándo o si regresaré al negocio en algún momento», señaló Ivanka en un comunicado, «pero sí sé que por ahora mi foco será el trabajo que estoy haciendo aquí en Washington , por lo que la decisión que tomo en este momento es la única justa para mi equipo y mis socios». Ahora que el padre presume de creación de empleo, la hija despide a 18 trabajadores . Hasta que se agoten, los productos seguirán a la venta, pero ya no habrá nueva producción.

Para esquivar un conflicto de intereses, Ivanka Trump dejó su puesto a principios de 2017. Sin embargo, siguió obteniendo beneficios mediante un fideicomiso que le daba autoridad para aprobar nuevos tratos. Solo en 2017, Ivanka ingresó al menos 5 millones de dólares vinculados a la marca. A pesar de ello, y también en parte por las campañas de boicot contra todo lo que huela a Trump, las ventas fueron cayendo (hasta en un 55% en 2017 en ventas online) e incluso algunas de las principales tiendas minoristas de Estados Unidos, como Marshall’s , Nordstrom y T.J. Maxx, retiraron los productos. También en Canadá. En un claro ejemplo de conflicto de intereses, una de las asesoras del presidente, K ellyanne Conway, animó a la compra de productos de Ivanka después del anuncio de Nordstrom .