«Filomena» causó daños en siete árboles singulares de la región y en cuatro nidos de cigüeña

La borrasca Filomena dejó algo más que pinares arrasados en la Casa de Campo o El Retiro y muchos problemas en las vías madrileñas. También se ha dejado sentir su efecto sobre la vegetación y la fauna de los montes madrileños . De hecho, siete árboles singulares, incluidos en el catálogo de protección de Madrid, han sufrido las consecuencias de las grandes nevadas.

Así lo ha explicado en la comisión de Medio Ambiente, y en respuesta a preguntas de la diputada de Más Madrid Alodia Pérez, el director general de Biodiversidad y Recursos Naturales, Luis del Olmo . Los siete ejemplares singulares que han sido dañados son el pino de Nuevo Baztán, el pino carrasco de Nuevo Baztán; la encina de Ambite, de unos 500 años de edad; el quejigo del Robledal, en Brea del Tajo; el pino del Olivar Torrejón de Ardoz, de 150 años; el enebro del depósito en Valdemorillo, en Cerro Alarcón; la higuera de Orusco de Tajuña, en la ermita de Bellaescusa, con casi 700 metros de alto; y el sauce de la galapaguera de El Paular, en Rascafría, con más de 70 años.

Según ha relatado Del Olmo, la consejería está utilizando imágenes de satélite para valorar los daños en las masas vegetales de los montes de la comunidad, un trabajo complicado por la enorme extensión a vigilar y la dificultad para acceder a algunas zonas, precisamente por las ramas caídas.

En su primera valoración, el Parque Nacional de la sierra de Guadarrama apenas ha sufrido daños , y en el resto de parques regionales se calcula en un 3 por ciento los daños irreversibles. Las mayores afectaciones se han dado en el curso medio del Guadarrama, en Navalcarnero y Villaviciosa; en las áreas forestales del sureste, como las de San Martín de Valdeiglesias y Cadalso, y las de Alcalá y Monte Gurugú en el este de la región.

Además, se han registrado daños en cuatro nidos de cigüeñas negras, donde la consejería tendrá que intervenir. Son los situados en Valdemaqueda, Valdemorillo, Aldea del Fresno y Rozas de Puerto Real.