Cazan por conducir sin cinturón en la Gran Vía a un asesino italiano huido desde 1985
Entregó a los agentes documentación falsa; su nerviosismo hizo levantar las sospechas
Una sucesión de golpes de efecto inesperados acabó ayer con la detención en pleno centro de Madrid de un italiano buscado por la Interpol. El individuo, de 70 años , fue arrestado por agentes de la Unidad Integral del Distrito Centro Norte de la Policía Municipal, en labores de patrullaje preventivo por la Gran Vía. Estaba en búsqueda y captura por un homicidio doloso perpetrado en el año 1985.
Los hechos tuvieron lugar poco después de las 17 horas del pasado domingo, cuando, a la altura del número 22 de la avenida, un coche policial dio el alto a un vehículo en el que ninguno de sus ocupantes circulaba con el cinturón de seguridad colocado. De inmediato, los agentes observaron que en su interior viajaban cuatro personas, un niño pequeño acompañado por sus padres en la parte trasera y un hombre de avanzada edad al volante.
El menor de edad tampoco estaba sujeto por ningún sistema de retención infantil ; hecho, este último, que llamó sobremanera la atención de los agentes. Fue entonces cuando los policías solicitaron la documentación a los pasajeros para efectuar las correspondientes denuncias administrativas. Pero antes de empezar los trámites, algo cambió radicalmente el devenir de los acontecimientos.
El conductor entregó una carta de identidad y un permiso de conducción, ambos de la República Italiana, en un evidente estado de nervios. Esto hizo levantar las sospechas, por lo que las autoridades decidieron llevar a cabo un análisis más exhaustivo. Corroboraron así que ninguno de los dos soportes reaccionaban a la luz ultravioleta y contaban, además, con blanqueante óptico, un colorante utilizado para evitar que se descubran determinadas falsificaciones.
Contra las cuerdas
Para despejar cualquier tipo de duda, los policías contactaron con el servicio de Documentoscopia de la Unidad de Investigación y Coordinación Judicial que, tras efectuar el pertinente peritaje, ratificaron la simulación de los documentos . Acorralado por el infortunio, el escurridizo criminal se vio obligado a revelar su verdadera identidad, lo que provocó una sorpresa mayúscula al comprobar que el apresado tenía una una orden de búsqueda, detención y personación por la Interpol debido a un homicidio doloso cometido más de tres décadas atrás.
La fecha de busca y captura estaba cursada el 26 de octubre de 1985 . Fue conducido a dependencias policiales, a la espera de pasar a disposición de la autoridad judicial. Pese a que en España los homicidios prescriben a los 20 años , el crimen habría sido cometido en el país transalpino, según aseguraron ayer fuentes policiales a este periódico.
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