Carmena planea uniformes para taxistas y reforzar inspecciones
El Gobierno local renuncia a regular los vehículos Uber y Cabify en este mandato
En pleno apogeo de la huelga de taxis, el gobierno de Manuela Carmena se comprometió a aprobar una ordenanza para regular el servicio de las empresas de Vehículos de Transporte con Conductor (VTC) en un plazo de dos meses. Cuando la cuenta atrás está a punto de expirar –el último pleno del mandato se celebra a finales de este mes–, la promesa se ha quedado en borrador : «El Ayuntamiento llevará en breve a la Junta de Gobierno su aprobación inicial, de modo que la tramitación continuará en el siguiente mandato», aseguran a ABC desde el área de Medio Ambiente y Movilidad. Para tratar de paliar el agravio comparativo del que se queja el sector del taxi, el Consistorio impulsará «con carácter inmediato» más inspecciones a las VTC.
El borrador de la futura ordenanza, que aprobará de manera definitiva, si así lo considera, el próximo gobierno municipal, contemplaba la prohibición de estacionar a menos de 100 metros del aeropuerto, estaciones de trenes como Atocha o de intercambiadores de autobuses. También se les aplicará el mismo precepto que a los taxistas sobre los horarios y los descansos: el Ayuntamiento quiere establecer una jornada máxima de 16 horas, salvo para los vehículos para personas con movilidad reducida.
Asimismo, tendrían dos días de libranza semanal . No obstante, al igual que ocurre con los taxistas, se podrán establecer días extraordinarios, como Nochebuena o Nochevieja. La futura norma también pretende limitar la circulación de los vehículos que viajen vacíos según la etiqueta ambiental de la DGT: los que carezcan de distintivo sólo podrán moverse sin pasajeros un 20 por ciento del kilometraje total diario; los B podrán hacerlo sólo un 35 por ciento; los C, un 50 por ciento; y los Eco, un 65.
Más control
Pero hasta que esa norma se consolide en el Pleno municipal, el Ayuntamiento ha solicitado al Ministerio de Fomento el acceso a la plataforma de datos para controlar de forma más eficaz que no circulen más del 20 por ciento de VTC de otras comunidades autónomas de las que transitan por la capital, como establece la ley. Estas inspecciones se realizarán de manera combinada entre el área de Medio Ambiente, los agentes de Movilidad y la Policía Municipal. El Consistorio utilizará las cámaras de acceso a Madrid Central para corroborar que las VTC que acceden al área de Bajas Emisiones cumplen con los requisitos.
La nueva ordenanza de taxi que prepara el Ayuntamiento incluye establecer un uniforme, un carné por puntos y abrir un fondo para la modernización del sector
Durante los 16 días de huelga, la Comunidad ofreció a los representantes sindicales de los taxistas una reforma «exprés» de la Ley del Transporte que incluyera las VTC. Sin embargo, tras el rechazo del sector al ofrecimiento, la reforma de la ley quedó descartada. La delegada de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés, justificó la demora en la tramitación de la ordenanza en que «esperó» a que la ley estuviera modificada para introducir los cambios que pudieran afectar al reglamento municipal.
Respecto a la modificación de la ordenanza del taxi, Sabanés se reunió la pasada semana con las plataformas del sector que le trasladaron con «casi total unanimidad» una propuesta para establecer un uniforme, un carné por puntos y dotar un fondo para la modernización del sector. Sobre la vestimenta indicó que no sería algo concreto, sino unas pautas, aunque ya consta en la actual norma la prohibición de «llevar determina indumentaria como chanclas o bañador» . Para el carné por puntos, Sabanés admitió que eso requiere modificar la Ley del Transporte de la Comunidad.
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