Crisis en el gobierno local de Orense
El PP «suspende» su pacto con Jácome, al que solo respalda ya un concejal
El alcalde orensano había retirado horas antes las competencias al líder del sector crítico, Miguel Caride, y otro edil, que habían solicitado hace quince días públicamente su dimisión
La crisis interna del gobierno local de Orense ha alcanzado este martes una nueva dimensión después de que el PP haya abandonado a su suerte a Gonzalo Pérez Jácome al anunciar la suspensión del pacto de gobierno que mantenía con Democracia Orensana. Esto, el mismo día en que el alcalde retiraba la competencias a dos de los ediles críticos, Miguel Caride y Manuel Álvarez, mientras decide qué hacer con la tercera de las concejalas que ha exigido su dimisión. En la actualidad, Jácome solo cuenta con el apoyo de uno de los seis concejales que restan en su grupo. Situación insostenible en la tercera ciudad de Galicia.
El encargado de anunciar esta «suspensión temporal, que no ruptura» ha sido el exalcalde y actual portavoz del PP en el consistorio, Jesús Vázquez, emocionado y «con mucho dolor», acabando incluso su comparecencia con la voz entrevortada. «El alcalde convirtió una crisis en su partido en una crisis de gobernabilidad , y el PP no va a ser cómplice de esta situación», ha manifestado rodeado por sus seis compañeros de grupo. Minutos antes ya le había avanzado personalmente al regidor orensano la decisión de los concejales populares, que han renunciado a todas las competencias de gobierno que tenían delegadas.
El PP no pronuncia la palabra «dimision», como sí hicieron los concejales críticos de DO , con Miguel Caride a la cabeza. El argumento es que se ha perdido «la confianza» en el alcalde después de las informaciones que hablan de una gestión opaca en los fondos públicos que recibe Democracia Orensana, y que llevaron a Caride a denunciar la situación a la Fiscalía. «Varios concejales vertieron acusaciones muy graves contra el alcalde que requieren una explicación inaplazable» , ha subrayado Vázquez, «no entendemos su pasividad ante afirmaciones que ponen en duda su honestidad y honorabilidad».
Para restaurar esa «confianza» perdida, Vázquez ya ha avisado que «hay que aportar mucha documentación, sino es muy difícil». «Son acontecimientos graves, moralmente no podemos estar acompañando una situación así», ha añadido. El PP no pide a las claras la dimisión pero sí enseña la puerta al alcalde para que abandone , porque de lo contrario habrá de gobernar casi con lo puesto, toda vez que esta misma mañana retiraba las competencias a dos de los concejales críticos de DO, Miguel Caride y Manuel Fenrández. Durante este martes se supo que otras dos concejalas de Democracia Orensana, María del Mar Fernández Dibuja y María Teresa Rodríguez, también renunciaban a sus competencias y se apartaban del gobierno, informa Ep. Si hace dos meses Orense contaba con un gobierno de catorce ediles, hoy son solo Jácome y Armando Ojea, nombrado hoy teniente de alcalde.
El exregidor y en la actualidad senador ha asegurado que en el PP «no se permiten ciertas cuestiones ni ciertos aspectos», como los que tienen al alcalde ahora mismo señalado.
«El resultado tiene que ser fuerte para la ciudad» , ha reclamado Vázquez, «con un gobierno que trabaje» para Orense «y que no esté en peleas internas». Además, ha reivindicado «la lealtad» del PP durante este último año y medio de coalición, a pesar de tener que cohabitar en el gobierno con Jácome, uno de los principales verdugos del PP durante el pasado mandato, cuando bloqueó cualquier posible entendimiento para aprobar presupuestos o actuaciones relevantes para la ciudad.
La decisión del PP no se produce «de la noche a la mañana» sino después de una reflexión interna en el seno de los siete ediles del grupo popular. «Los compañeros fuimos madurando y viendo, y adoptamos decisiones». Vázquez ha eludido comentar si el abandono del pacto de gobierno cuenta con el aval de las direcciones regional o provincial del PP. Lo que parece claro es que la estabilidad del gobierno de la Diputación no parece comprometida, toda vez que Miguel Caride no estaría por la labor de facilitar otra mayoría alternativa a la que ahora mismo ostenta Manuel Baltar. La crisis de la ciudad no va a salpicar a la Diputación.
Noticias relacionadas