El SUP se niega a acudir a un acto al que asistirá el alcalde de Santiago

Los representantes del Sindicato Unificado de Policía (SUP) en Santiago no acudirán este lunes a los actos organizados en la ciudad con motivo del día de la Policía. Abel Lobato, vicesecretario provincial del SUP, explica que su ausencia se produce para no coincidir con el alcalde Martiño Noriega y otros miembros de la corporación local. El colectivo policial sigue molesto porque el regidor «no apoyó» a los efectivos policiales que actuaron en el desalojo del centro ocupado Escarnio e Maldizer la pasada primavera.

«Hubo seis agentes que tuvieron que coger la baja por servicio y no oímos de la corporación municipal nada a favor de ellos», indica Lobato, quien recuerda que la actuación policial se realizó cumpliendo un auto judicial que ordenaba el desalojo para devolver el inmueble situado en la Algalia de Arriba a sus propietarios. Los okupas llevaban años empleándolo como centro social y realizaban distintas actividades como conferencias, conciertos o proyección de películas en el inmueble que durante años había sido la sede de la agrupación folclórica Cantigas y Agarimos.

Esta semana el alcalde de la ciudad, Martiño Noriega se refirió también a la ausencia del SUP en los actos del día de la Policía. Noriega recordó que no es la primera vez que el sindicato decide no acudir a esta celebración, por lo que demandó que no empleen ahora una « excusa» para no ir, según informó Efe. El vicesecretario provincial reconoce que en otras ocasiones han faltado a la cita, pero explica que los motivos habían sido distintos. «No fuimos cuando estuvimos en negociaciones por subidas salariales o porque habíamos pedido la condecoración de algún compañero y no se le había concedido», explicó Abel Lobato. «Pero nunca dijimos que no asistíamos por determinada persona, salvo este año», añadió el sindicalista.

Pese a las tensión con el SUP continúa, el alcalde Martiño Noriega consideró esta semana que las relaciones entre los representantes municipales y los cuerpos policiales de la ciudad son «cordiales» y «de cooperación» y confió en que lo van a seguir siendo en el futuro.

Tras la intervención policial en el Escarnio y Maldizer, Compostela Aberta—el grupo del gobierno local— publicó un comunicado que sostenía que no avalaban el desalojo por entender que no era «la manera adecuada de proceder por parte de las instituciones públicas, en este caso de la judicatura y de los cuerpos de seguridad del Estado» y rechazaban «el uso de la fuerza como vía para solucionar estas situaciones». El alcalde de Santiago criticó también que la Delegación del Gobierno no le informase de la intervención. Martiño Noriega aseguró que se podrían haber evitado los incidentes violentos ocurridos en la posterior concentración contra el desalojo, que acabó en batalla campal por el centro histórico de Santiago. Posteriormente, el regidor rechazó también apoyar una moción del Partido Popular en el Ayuntamiento en defensa de la acción policial, la propiedad privada y el cumplimiento de las sentencias judiciales tras los sucesos ocurridos en el desalojo del centro social okupado.