La joven desaparecida en Baralla se escondió porque se sentía acosada

Tras dos días sin noticias de Beatriz López, su familia recibió a media tarde de ayer el aviso de que la joven había sido localizada en buen estado en un hostal de Lugo . La chica, de 26 años y originaria del municipio de Baralla, se habría ocultado en este establecimiento —según las primeras informaciones— huyendo de las presiones a las que la estaba sometiendo un joven al que conoció hace dos años a través de una red social. Precisamente, y horas antes de que Beatriz diese señales de vida, este chico de 31 años había sido detenido por la Policía porque en su relato había piezas que no encajaban. El arrestado se presentó en la comisaría el pasado viernes acompañado de los padres de Beatriz López y de su compañera de piso, que reveló que el detenido había incurrido en muchas contradicciones en su declaración ante los agentes. De ahí que los investigadores entendiesen que había «indicios suficientes» para mantenerlo retenido en los calabozos de la comisaría. Su arresto dejó al descubierto un presunto acoso al que llegó a referirse al círculo más cercano de la desaparecida, que incluso habría bloqueado a esta conocido en sus redes sociales y en su teléfono para evitar que la presionase. En este sentido, la compañera de piso de Beatriz describió a su amigo —apuntó que no mantenían una relación sentimental— como un joven «celoso» y «muy posesivo», de los que piensan «que o eres para mí o para nadie».

Según informaron fuentes policiales, la joven se inscribió en el hostal sin saber que su familia y la Policía la estaban buscando , aunque su móvil permanecía desconectado desde el día de su marcha. Acerca de su desaparición, la compañera de piso de Beatriz afirmó que «todo fue muy extraño porque a las cinco de la tarde la había visto bien, se había despedido de mí con un beso y todo perfecto». Cuando regresó a casa, la muchacha se alarmó al encontrar las ventanas abiertas y la televisión encendida «porque además habíamos quedado para ducharnos y salir a cenar juntas».

El detenido fue la última persona que vio a Beatriz antes de que ésta decidiese desaparecer de forma voluntaria. Sobre ese momento, contó a los agentes que primero la acompañó en furgoneta hasta una asesoría donde debía realizar un pago y más tarde la acercó al lugar donde ésta habría quedado con otro chico. Tras su localización, Beatriz López fue traslada la comisaría donde los efectivos encargados del caso le tomaron declaración . Pese a su aparición, el detenido se mantenía al cierre de esta edición en los calabozos. Fuentes cercanas confirmaron a Ep que hoy pasará a disposición judicial por un posible caso de violencia de género.

La Policía anunció este lunes que concluyó las diligencias abiertas tras la desaparición de la joven, hallada finalmente sana y salva en un hostal de Lugo, e indicó que espera que en las próximas horas pase a disposición judicial el hombre detenido sospechoso de agredirla.

Fuentes de la Policía Nacional confirmaron a Efe que el detenido , de 31 años de edad, residente en Baralla, permanece en los calabozos de la Comisaría Provincial y podría pasar a disposición judicial «en las próximas horas».