Hijos de J. Barreras pide la disolución para intentar ganar tiempo

El astillero vigués Hijos de J. Barreras intenta ganar tiempo. El Consejo de Administración pidió hoy en el Juzgado de lo Mercantil número 3 de Pontevedra, con sede en Vigo, la disolución judicial de la sociedad para sortear el concurso de acreedores . El astillero, en preconcurso desde principios de octubre, no contaba con el mínimo de capital que le obliga la ley para seguir funcionando, unos cinco millones de euros. Si no demostraba tenerlo hoy, el juzgado activaría el concurso que podría suponer el fin de una empresa con 127 años a sus espaldas . Con la disolución, se retrasa esta posibilidad hasta el próximo día 2 de febrero .

El pasado viernes transcendía un principio de acuerdo entre los accionistas del astillero, pero todavía no está cerrado . La naviera Ritz Carlton Yacht Collection mostraba su disposición para quedarse con el 75% de la empresa adquiriendo las participaciones del socio mayoritario, la petrolera mexicana Pemex (51%) y la sociedad Albacora, que posee otro 24,5%. Pero los implicados en la operación todavía siguen negociando sin que se haya alcanzado ningún pacto en firme.

Barreras llegó al preconcurso con la mayor carga de trabajo de los últimos tiempos, dos cruceros de lujo para Ritz Carlton, dos ferris para la naviera noruega Havila y otro ferri para la española Armas . El paquete conjunto ascendía a unos 950 millones de euros. Aunque teóricamente el astillero debería de vivir su mejor momento, la realidad era que sus cuentas estaban en números rojos. La construcción del minicrucero de lujo, el primero de estas características que realizaban tanto el astillero vigués como la naviera, acarreaba ya sobrecostes cercanos a los 50-60 millones de euros y todavía no estaba acabado.

Ritz Carlton se ha comprometido en el preacuerdo a aportar esa cantidad para cubrir el desfase presupuestario del crucero de lujo. Pero los trabajadores temen que la naviera estadounidense esté solo interesada en acabar sus barcos y no asuma el resto de la carga de trabajo. El comité de empresa indica que finalizar el crucero de lujo sólo supondría retrasar la quiebra del astillero unos meses. El cierre de Barreras dejaría en la calle a 200 personas de plantilla directa y supondría un duro golpe para la industria auxiliar viguesa, que aporta otros mil trabajadores en momentos de máxima ocupación . El astillero debe ya a 32 de estas empresas unos 20 millones de euros, según los cálculos de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Galicia (Asime).

Tras varias protestas en Vigo para exigir futuro para el astillero, el comité de empresa ha logrado que el Igape los cite a una reunión mañana en la que les informarán de como avanzan las negociaciones entre los accionistas. Los trabajadores volvieron hoy a protagonizar un paro a las puertas del astillero.