CRISIS EN CIUDADANOS GALICIA
La dirección nacional no descarta expulsar a los coordinadores críticos
El secretario de Organización viaja a Santiago, pero sus explicaciones no convencen a la militancia coruñesa
Hervías carga con dureza contra el diputado cesado por «no saber o no haber leído» el programa electoral

La visita a Santiago del secretario de Organización de Ciudadanos a nivel nacional, Fran Hervías, causó una gran expectación después de la convulsa semana que ha pasado el partido tras la destitución y relevo de su único diputado en Galicia, Antonio Rodríguez. La decisión de la dirección nacional provocó fuerte contestación interna, especialmente entre algunas agrupaciones de la provincia de La Coruña, y ante la amenaza de rebelión , el conocido como «Señor Lobo» —en referencia al personaje de la película Pulp Fiction— de la formación naranja se presentó para solucionar el problema que le han generado los militantes díscolos .
Debido a los antecedentes de «purgas» en algunas agrupaciones gallegas perpetradas hace meses, muchas de las voces que se alzaron esperaban una mañana de cuchillos largos en el Palacio de Congresos compostelano. No fue así, al menos por ahora. Hervías compareció ayer delante de los medios de comunicación antes que ante sus compañeros de partido . Con el único motivo de «explicar las causas de un tema que ha generado malestar entre algunos afiliados », el miembro de la dirección nacional se empleó en arremeter contra su ya excompañero de bancada en el Congreso.
Sin elevar nunca el tono ni perder las buenas formas, Hervías insistió en que Rodríguez «no cumplió las expectativas» que se habían puesto en él. Aludiendo a su «trayectoria y capacidades de oratoria», deslizó la idea de que el exdiputado «quizá no supo explicar las propuestas que el partido tenía para Galicia, o no se leyó el programa electoral». Precisamente, explicó su relevo por José Canedo —excandidato de UPyD en 2012 a la Xunta —, argumentando que «conoce mejor el programa, es uno de los militantes más antiguos de Ciudadanos en Galicia y ayudó a implantar el partido en la Comunidad, sin requerir nunca un puesto en ninguna lista ».
Aunque Canedo no concurrió a ningún proceso de primaras, el secretario de Organización quiso legitimar su elección en que es una decisión del Consejo General del partido, un órgano que «cumple con los estatutos y representa a las bases , en tanto que sus miembros son elegidos mediante votación en listas abiertas».
Fervías también culpó a Rodríguez de haberse «autoexcluido» de la dinámica del partido, y reconoció que se le ofreció el número dos en la lista del 26-J. Lo que no confirmó fue que se le hubiese ofrecido un puesto en la candidatura para las próximas autonómicas, algo en lo que sí han insistido tanto Rodríguez como parte de las voces críticas durante esta semana.
De la asamblea se daba por hecho que acarrearía un rosario de expulsiones, pese a que la dirección nacional contaba solo con una treintena de afiliados «molestos». A su llegada, Hervías señaló que «no se contemplaron en ningún momento» expedientes o amonestaciones , pero hacia el final de la reunión volvió a atender a los medios y matizó sus palabras con un «de momento», subrayando que el corte de comunicación de los coordinadores con las redes internas del partido era una medida provisional hasta que se aclarese el conflicto. Sabedor de que sus explicaciones no dejaron satisfechos a los discordantes, explicó que si no cesan en su actitud en los próximos días sí se podrían tomar medidas . «Si siguen empleando términos como dedazo o cacicada después de recibir las explicaciones tendremos que entender que quieren destruir el partido internamente y dañar la imagen a conciencia. Ahí entraríamos en otra fase», zanjó.
«Decepción»
El descontento interno se mantuvo entre los críticos una vez finalizada la asamblea. «Esto no va de defender a Antonio Rodríguez, aquí el problema es que se ha pasado por encima de unas primarias para poner a un candidato que nadie quiere», comentó para ABC un miembro de una directiva coruñesa y lamentó que «de poco vale que los estatutos digan algo que va contra nuestros principios teóricos . Si queremos imponerle las primarias al resto de partidos, al menos deberíamos respetar las nuestras». Tras mostrar «decepción», con un partido que «opera con un comportamiento estalinista», las mismas fuentes aseguran que el movimiento esperable en los próximos días es la disolución de las ejecutivas que iniciaron la rebelión. En la ciudad de La Coruña ya apuntan que «no tiene sentido seguir y, bien hacer campaña por un candidato en el que no crees, o bien no hacer campaña por él».
Noticias relacionadas