«El boca a boca ahora mismo es terrorífico, te mina psicológicamente»

El trabajo de algunos es imprescindible para enfrentarse a la alerta sanitaria. De hecho, la labor de Teresa García (59) es doblemente imprescindible estos días. Además de trabajar en una farmacia por las mañanas, por la tarde continúa al pie del cañón como voluntaria de Cáritas en Milladoiro , en el municipio coruñés de Ames, pese a encontrarse dentro de los grupos de riesgo. «Soy asmática, pero tengo la moral por las nubes. Y si lo cojo, mala suerte, es el momento de estar con los que peor lo están pasando», expresa Teresa en conversación con ABC.

El coronavirus no ha sido capaz de trastocar su vida, ya que es voluntaria desde hace tres años, pero sí la de quienes solicitan este servicio. «La cola se duplicó en el reparto de comida de ayer, hemos pasado de atender a 20 a 40 familias en una semana», cuenta Teresa. Las personas a las que dan servicio no pueden salir a trabajar estos días, las facturas se les acumulan y, para muchas de ellas, con menores a su cargo, el cierre de los comedores escolares supone un varapalo inasumible: « Es una cuestión de empatía , los colectivos más vulnerables no pueden garantizar un plato en su mesa».

El secreto de Teresa es «sacar fuerzas de donde sea» , ya que cree que «al final del túnel siempre hay luz y lamentarse no sirve de nada» en estos momentos. Peores que las consecuencias económicas son, según ella, las psicológicas, sobre todo para la gente mayor. «Imagina vivir solo y que te sometan a aislamiento obligatorio, el boca a boca sea tu único medio de comunicación y que solo te lleguen barbaridades y comentarios negativos sobre el futuro. ¡Es terrorífico, te mina!».