CINE

Bronca en el Goya de animación: impagos y críticas a la directora

Los trabajadores aseguran que Chelo Loureiro no ejerció como directora, teniendo que asumir el cargo cuatro integrantes del equipo

«Estamos estudiando el terreno para llevarlo a sede judicial», señala el coproductor de 'Valentina'

Chelo Loureiro durante su discurso en los Goya EFE

Ántar Vidal

El sábado, durante la ceremonia de los Goya , Chelo Loureiro se subía al escenario del Palau de les Arts de Valencia para recoger el premio a Mejor Película de Animación en calidad de productora y directora. Ahora, su papel en la película está en entredicho . 'Valentina' es la película que la ferrolana ha producido con su empresa Abano y, según ella misma contaba y aparece en los créditos, dirigió, pero una gran parte de los trabajadores del filme han cargado contra Loureiro: « No sabíamos nada de ella », y desde el proceso de producción de la obra tuvieron que asumir la responsabilidad de la dirección cuatro integrantes del equipo, explica la portavoz de los trabajadores, Raquel Rodríguez.

Más de 20 personas del equipo de 'Valentina' han firmado un comunicado, remitido el viernes, en el que exponen su versión del rodaje de la película: impagos, irregularidades en los títulos de crédito y atribución de funciones que no se han desempeñado por Loureiro . Brandán Álvarez, CEO de Antaruxa, la empresa que llevó a cabo la animación de la obra galardonada, explica que, incluso, Loureiro se quitó de los créditos como 'productora ejecutiva', el papel que sí desempeñó, y se puso como directora para «poder recoger el Goya. El punto 30.4 de las bases indica que los productores ejecutivos pueden recibirlo».

Pero todo se remonta a mucho antes que este sábado. 'Valentina' comenzó producción en septiembre de 2019, y durante la preproducción de la película Loureiro sí estuvo presente. Incluso fue la guionista. Pero desde entonces «desapareció totalmente», cuenta Rodríguez. «Puedo contar con los dedos de las manos las veces que se pasó por el estudio», asegura, e indica que también dejó de responder a los informes diarios que le enviaban los trabajadores. Dada la situación, había dos opciones: « O perder lo invertido, o asumir la dirección », dice Álvarez, coproductor. Fueron él mismo, Rodríguez, Raquel Ramos y Sandra Varela las encargadas de sacar adelante el proyecto, según relata. «Pasaban semanas y no sabíamos nada de ella».

A pesar de todo, «se la instó hasta el último momento», y «pudo haberlo resuelto de mil maneras, pero no se quisieron hacer las cosas bien», dice Brandán. Ahora, Antaruxa está explorando el terreno judicial del asunto , porque cuenta que los cambios sin consentimiento que Loureiro hizo en los créditos podrían ser un delito. « Hay ausencias, duplicidades, cambios de roles », dice el CEO, e incluso aparecen nombres de personas y empresas que «no tenemos claro cual ha sido su trabajo».

La producción de ‘Valentina’ estuvo maldita desde casi el comienzo. El descontrol y la falta de acuerdo entre las empresas desencadenó un ambiente de trabajo hostil y complicado. Nani García, compositor de la banda sonora de la película, ha criticado a Brandán por las trabas que, según él, puso a la producción. «Si existe un conflicto laboral o se está en desacuerdo, la respuesta es marcharse », declaró para Ep. Loureiro, por su parte, asegura que «todo el mundo ha cobrado . Lo que han hecho ha sido estropear un día de fiesta como es poder conseguir un Goya», cuenta a Europa Press. «Ha sido muy triste. Ni siquiera me dejan disfrutarlo», declara.

Impagos a los trabajadores

Dos de los empleados todavía no habrían cobrado sus facturas, según cuenta Rodríguez. Son personas ajenas a la productora, pero que han intervenido en la película. Uno de ellos lo habría hecho en forma de freelance, de autónomo, y lleva desde finales de noviembre sin cobrar su última factura, señala Rodríguez. «Chelo contrató varias veces a lo largo de la producción a este animador 2D», pero no le ha pagado la parte de su trabajo correspondiente a la última secuencia de la película, asegura.

El otro trabajador todavía pendiente de cobro había firmado su contrato a través de la FUAC (Fundación Universidade da Coruña), en calidad de «profesor-investigador». La Universidad está al tanto, dice Rodríguez. Poco antes de que terminara el contrato, aunque «lo iban a extender», e l afectado cogió una baja por paternidad , por lo que el contrato «quedó congelado» y Loureiro solo tendría que avisar de su reincorporación a la FUAC cuando se incorporara. Sin embargo, no lo hizo , cuenta, y «con toda la buena fe» el trabajador volvió a su labor.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación