Política
El retraso del congreso de Ciudadanos por el coronavirus pospone los cambios en la Comunidad Valenciana
La reestructuración del partido a nivel autonómico se encuentra en el aire a la espera de la celebración de la asamblea, mientras Toni Cantó estudia alguna variación en el grupo parlamentario
El portavoz en las Cortes Valencianas se muestra abierto a apoyar una reforma de la ley electoral si se mejora la proporcionalidad provincial
El aplazamiento de la Asamblea General que Ciudadanos tenía previsto celebrar el próximo fin de semana debido al coronavirus tiene su consecuencia directa en las autonomías. El congreso ha de decidir la estrategia y la organización del partido, por lo que al no tener fecha todavía tampoco la hay para los cambios que a continuación han de acometerse en los territorios .
En el caso de la Comunidad Valenciana, una de las cuestiones pendientes más importantes es la designación de Toni Cantó como coordinador autonómico , una figura de nueva creación en sustitución de la de portavoz, que actualmente ostenta Fernando Giner. Queda por definir, sin embargo, el organigrama nacional. Por ejemplo, si seguirá existiendo la secretaría de Organización como tal o esas competencias se repartirán entre más cargos. Algo que se trasladará a las estructuras de las comunidades del mismo modo.
Los nombramientos seguirán dependiendo de la dirección nacional, pero resultará relevante el perfil que se coloque para ocupar, entre otros, ese puesto de secretario de Organización -si es que así se llama- en tanto en cuanto hasta ahora lo ostentaba Emilio Argüeso, con el cual Cantó mantenía un evidente enfrentamiento. Así, se demostrará qué «familias» cuentan con el control del partido en la nueva era de Ciudadanos. El portavoz en las Cortes Valencianas espera, por tanto, que se le escuche a la hora de designar. Máxime cuando, además, él mismo pasará a formar parte de la Ejecutiva en Madrid.
Tampoco tiene fecha de convocatoria el Comité Autonómico , que lleva meses sin reunirse y carece de sentido que lo haga antes de que se aborden los cambios en la estructura.
Otra de las intenciones de Cantó pasa por llevar a cabo cambios en el grupo parlamentario en el reparto de áreas o en las portavocías adjuntas cuando se cumpla el primer año de legislatura. El síndic cuenta con un grupo de fieles, algunos de los cuales llevan muchos de los ámbitos de peso en las Cortes y cuentan con un mayor protagonismo en las intervenciones. Ruth Merino, Carlos Gracia, María Quiles, Fernando Llopis, Tony Woodward o Vicente Ferández son un ejemplo. Las portavocías adjuntas, sin embargo, las ocupan, aparte de Merino, Merche Ventura y Yaneth Giraldo, cuando especialmente esta última es cercana a la corriente de Argüeso, crítica con el síndic.
El aplazamiento de la reestructuración interna de Ciudadanos retrasa igualmente cualquier decisión sobre la política de pactos . En la Comunidad Valenciana, la formación naranja mantiene acuerdos con el PP en importantes instituciones, como la Diputación y el Ayuntamiento de Alicante. Pero recientemente, el caso del consistorio de Torrent, donde han llegado a un acuerdo con el PSOE, puede suponer el preludio de un nuevo rumbo.
Ley electoral
En cuanto a las cuestiones políticas en el Parlamento, uno de los debates más interesantes que podría retomarse es el de la reforma de la ley electoral . PSPV, Compromís y Podemos ya informaron el pasado diciembre de que estudiaban reabrirlo durante 2020 . El punto principal del texto elaborado por los socios de Gobierno en la pasada legislatura era la rebaja de la barrera electoral del 5% al 3% a nivel autonómico y provincial como porcentaje mínimo para obtener representación, lo que favorecería la entrada en las Cortes de partidos minoritarios.
Ciudadanos frenó en seco las negociaciones y puso, entre otras condiciones, la de que hubiera circunscripción única para que exista mayor proporcionalidad y que el voto valga lo mismo sin importar el territorio en el que se ejerza el derecho. Con ello, defendían, se eliminaría la sobrerepresentación en lugares como la provincia de Castellón. Pero para ello resulta necesaria la reforma del Estatuto de Autonomía.
Los naranjas parece que no plantean ahora esa línea roja, sino que se muestran dispuestos a negociar cualquier mejora, por mínima que sea, de esa proporcionalidad . Lo que seguiría suponiendo que Castellón pierda la sobrerepresentación actual. Con este requisito, que tampoco resultará sencillo de negociar, se lograría -con el apoyo de Ciudadanos- los dos tercios de la Cámara necesarios para sacar adelante la reforma.