Política
El Gobierno valenciano presenta los presupuestos al límite y con una elevada tensión entre PSPV y Compromís
Los socialistas se llegaron a plantear aprobar el proyecto de las cuentas sólo junto a Podemos debido a los duros enfrentamientos
No ha habido prórroga de los Presupuestos de la Generalitat, pero el proyecto de los de 2020 se ha aprobado e n tiempo de descuento y con no pocos problemas . La última semana ha sido de intensa elaboración debido a la reciente decisión de tener nuevas cuentas -cuando algunas voces, como el propio conseller de Hacienda, Vicent Soler, preferían continuar con las de 2019-. Unos plazos cortos, un contexto político preelectoral y unas relaciones cada vez más enrarecidas entre los socios del Gobierno autonómico que ya auguraban complicaciones como así ha ocurrido.
La jornada de ayer no finalizó de la mejor manera. De hecho, ya entrada la noche, desde el PSPV veían el horizonte de este jueves negro. Según algunas fuentes, los cargos socialistas se marcharon a casa con serias dudas de que la propuesta de Presupuestos fuera hoy aprobada conjuntamente por los tres socios. La opción de una votación al estilo de la del anticipo de las elecciones autonómicas el pasado marzo no resultaba descabellada. Es decir, que los socialistas hubieran aprobado junto a Podemos-Esquerra Unida el proyecto, pero sin Compromís . Con la diferencia de que esta habría resultado mucho más grave por lo que habría comportado: que la ley más importante para un Gobierno no saliera adelante y que supusiera una ruptura total entre los socios.
Esta mañana, sin embargo, en la comisión delegada de Hacienda el tripartito daba luz verde de forma unánime, lo que ha llevado al PSPV a acudir con mayor tranquilidad al pleno del Consell. Pero la calma ha durado poco y la tensión se ha vuelto a elevar considerablemente .
Mientras desde la Conselleria de Hacienda trataban de explicar que únicamente se trataba de algunos «flecos» por cerrar, lo cierto es que estos flecos, insignificantes en cuanto a cantidades dentro del global del Presupuesto, han conllevado un importante enfrentamiento. El punto de discordia principal ha sido si la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI) pasaba a gestionar unos 50 millones en líneas de subvenciones a centros tecnológicos que permanecían en manos del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace), adscrito a la Conselleria de Economía de Rafael Climent (Compromís).
Los socialistas defendían que así fuera puesto que la AVI, que la legislatura pasada dependía de Presidencia, está ahora ligada al nuevo departamento de Innovación que dirige Carolina Pascual. De hecho, tanto la Agencia como la Conselleria han sido dos apuestas personales del presidente de la Generalitat , Ximo Puig.
Gran enfado en el PSPV
En esta batalla de competencias que se lleva produciendo desde que comenzó a andar el nuevo Ejecutivo autonómico, Compromís no estaba de acuerdo con el PSPV. Y, finalmente, el dinero se quedará donde estaba , gestionado por el Ivace. Con el consiguiente cabreo de los socialistas al entender que carece de sentido y que legalmente no era posible. E, incluso, la amenaza de dimisión de Pascual .
De hecho, tras ese acuerdo final que ha dilatado el pleno del Consell -y del cual han salido sus titulares con todo lo sucedido reflejado en el rostro-, el proyecto de Presupuestos ha sido entregado para su tramitación en las Cortes Valencianas con dos horas de retraso y junto a un documento de corrección de errores elaborado por Hacienda antes de acudir al Parlamento en el que figuraba el asunto del Ivace.
Otro de los puntos conflictivos con Compromís ha sido la aportación del Estado a la financiación de la Dependencia , departamento en manos de Mónica Oltra. Actualmente se encuentra en un 12% y normalmente se incluye en las partidas de ingresos llamadas «reivindicativas», que en realidad se trata de estimaciones ficticias puesto que no está asegurado que vayan a llegar. Inicialmente, se iba a incorporar que el Estado asumiera el 20%, pero se ha aumentado al 50%.
Noticias relacionadas