El padre de la víctima más joven del 17-A: «Que la muerte de mi hijo sirva para algo»

Xavi tenía tres años cuando la furgoneta que conducía Younes Abouyaaqoub se llevó por delante en Las Ramblas su vida y su futuro. Es la víctima más joven de los atentados de Barcelona y Cambrils. Su padre, Francisco Javier Martínez, ha testificado hoy viernes en la cuarta sesión del juicio del 17-A que se celebra en la Audiencia Nacional. Francisco ha dejado en la sala un relato de dolor y de rabia por crimen: «Quisiera que al menos sirviera para algo la muerte de mi hijo» .

Francisco Javier, natural de Rubí (Barcelona), no estaba en Las Ramblas aquella tarde del 17 de agosto de 2017. Él estaba trabajando, como electricista, en labores de mantenimiento de un edificio en otra zona de Barcelona. Su mujer, sus hijas y algunos familiares más eran quienes estaban, junto a Xavi, caminando por las Las Ramblas, en dirección a la estación del tren de plaza Catalunya para regresar a casa.

Fue su mujer quien le telefoneó para decirle que habían atropellado a Xavi . Cogió un taxi y se plantó el centro de salud donde habían llevado a su hijo. Allí le esperaban su mujer y sus hijas . Un médico les advirtió de que su estado de salud era crítico, que lo trasladarían a un hospital. Pero los sanitarios no lograron evitar su muerte. «Intentaron salvarle la vida, pero se le paró el corazón y no pudieron hacer nada», ha explicado al tribunal que preside el juez Guevara. «¿Hay suficiente dinero en el mundo para sacar a mi hijo del nicho?» .