La Fiscalía pide siete años y medio de cárcel para un manifestante por causar altercados y agredir a un mosso en las protestas postsentencia
El acusado alega que el atestado policial que recoge los hechos que se le imputan por su actuación el 17 de octubre de 2019 es falso
Tercer día de protestas postsentencia en Barcelona , y tercer día de disturbios . Era 17 de octubre de 2019, y un centenar de manifestantes, algunos encapuchados y protegidos con cascos, montaron barricadas, quemaron contenedores, y lanzaron cócteles molotov contra la línea policial que custodiaba la Delegación del Gobierno.
Entre estos, según el escrito de acusación de la Fiscalía, se encontraba Max Castellarnau , que también «lanzó algún objeto» contra los agentes. Cuando varios mossos bajaron de su furgón y le pidieron que se identificase, el manifestante salió corriendo al grito de: «joderos hijos de puta», pero unos metros más adelante topó con más uniformados.
Estos trataron de detenerlo, pero al resistirse, todos cayeron al suelo. Cuando uno de los mossos trató de colocarle las esposas, Castellarnau le habría propinado una patada en la rodilla, golpe que le causó un hematoma, inflamación y leve afectación funcional, aunque no necesitó la baja médica.
Por este motivo, el Ministerio público solicita siete años y medio de prisión para el manifestante , acusado de desórdenes públicos, atentando contra la autoridad y lesiones leves, mientras que la Generalitat solicita para él dos años cárcel.
Cuando fue detenido, llevaba encima un casco de escalada, rodilleras, gafas de protección, y guantes construcción, con lo que concurre también el agravante de uso de disfraz -en relación al delito de atentado-.
Atestado «falso»
Por su parte, el joven indica que el atestado policial sobre el que se construye la acusación es falso. El juicio comenzará este miércoles en la Audiencia de Barcelona .
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