Fallece el sacerdote y escritor Josep Maria Ballarín, «Mossèn Tronxo»
El religioso cerró la lista de Junts Pel Sí en Lleida en las pasadas elecciones

El sacerdote y escritor Josep Maria Ballarín, popularmente conocido como «Mossèn Tronxo» por el título de uno de sus libros, ha fallecido en la la madrugada de este viernes a los 96 años.
Ballarín, que ejerció en el santuario de Queralt (Barcelona) y colaboró con varios medios de comunicación, ha muerto fue reconocido por unir el mensaje evangélico con la actualidad cotidiana desde un punto de vista irónico y popular. Él mismo se defenía a sí mismo como un cura «atípico».
Comprometido con sus raíces y Catalunya, Ballarín (Barcelona, 1920) cerró la lista de JxSí en la demarcación de Lleida para las elecciones catalanas del 27 de septiembre de 2015, después de señalar: «Sentirse poseído por tu tierra no es política», informa Ep.
El sacerdote fue especialmente conocido tras publicar la novela «Mossèn Tronxo» (1990), que durante la década se convirtió en uno de los libros más leídos de la literatura catalana. Posteriormente, publicó «Tronxo, m'hi torno» (1994), «Santa Maria, pa cada dia» -con el que ganó el Premi Ramon Llull -, «L'illa de Guacamai» (2006), la compilación de relatos «El bon Déu dels bolets» (1999) y la autobiografía «Retrat d'una vida» (1993), entre otros.
En 1995 recibió la Creu de Sant Jordi de la Generalitat por su trayectoria destacada, y en abril de 2015 publicó sus memorias bajo el título «El sac dels records».
En 1941, fue movilizado en la conocida como «quinta del biberón», y al acabar la Guerra Civil fue internado en un campo de concentración; contrajo la tuberculosis, y posteriormente fue enviado a Zamora, donde continuó como militar. En 1946 ingresó en el Oratorio de Sant Felip Neri de Gràcia en Barcelona, y estudió Teología en el Seminario de Solsona (Lleida), donde al acabar los estudios fue prefecto y profesor durante seis años.
Ejerció la tarea pastoral en el santuario de Queralt (Barcelona) entre 1958 y 1993, después de ser apartado por un conflicto del que pasa de puntillas en sus memorias, y desde ese año vivió en Gósol (Lleida). Dirigió la colección «Blanquerna d'espiritualitat» y sus obras, que reflejaron su experiencia como sacerdote rural y su vinculación con el territorio, fueron traducidas al castellano y al italiano.