Las últimas previsiones del tiempo para la Semana Santa de Castilla y León 2022

Dentro de dos días, con motivo del Viernes de Dolores, hermandades y cofradías comenzarán a echarse a la calle de ciudades y pueblos de Castilla y León con ganas de recuperar los ritos y procesiones paralizados tras dos años de pandemia. Por eso, estos días previos devotos y visitantes miran al cielo deseosos que el tiempo acompañe. Era el deseo también expresado hace unos días por el arzobispo auxiliar de Valladolid, Luis Argüello, quien recordaba que «muchas de nuestras cofradías llevan ya tres años sin salir», ya que en 2019 muchos de estas procesiones se tuvieron que suspender por el mal tiempo.

Parece que no va a ser el caso en esta deseada Semana Santa. Al menos no durante los días centrales, si bien un frente barrerá la Comunidad el lunes y martes santos, segúna ha adelantado a este periódico el jefe de Predicción de la Delegación de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) en Castilla y León, Jesús Gordaliza.

En concreto, según ha detallado, las máximas comenzarán a subir a partir de este mismo miércoles, concluido ya el episodio de «heladas generalizadas y fuertes» que volvieron a traer estampas invernales ya iniciada la primavera. Así, a partir de hoy mismo, las temperaturas máximas recuperarán los valores «normales« para esta época, y aunque se esperan lluvias «sobre todo este viernes en el oeste y norte de la región», serán «pocos significativas».

Ya el sábado «solamente quedarán algunas precipitaciones dispersas» y el cielo se despejará completamente para el domingo, día en el que se espera una «importante subida de temperaturas con viento sur»: «Es decir, el Domingo de Ramos será un día en el que no habrá precipitaciones y las temperaturas serán más altas de lo normal». En concreto, las máximas subirán de manera generalizada por encima de los 18 grados, «e incluso en algunos casos rebasaremos los 22 grados».

Será un 'impasse' de buen tiempo, ya que según el experto de la Aemet las precipitaciones volverán para el Lunes y Martes Santo, días en los que se espera que «una serie de frentes de lluvias barran toda la región». Serán dos días de precipitaciones y también en los que las temperaturas máximas volverán a bajar.

No obstante, la tendencia que se espera a día de hoy es que a partir del Miércoles Santo «vuelva otra vez la estabilidad». Aunque Gordaliza advierte que aún es pronto para hacer pronósticos para los días centrales de la Semana Santa, la «tendencia a muy largo plazo» es que no haya precipitaciones a partir del miércoles y hasta el Domingo de Resurrección, días en los que habrá «un predominio de sol y temperturas normales o superiores a la época».