Mañueco, a Pablo Fernández: «Usted es un Iglesias en pequeñito»

El presidente de la Junta pide a Podemos en las Cortes que deje ya la división «entre buenos y malos»

Pablo Fernández, durante su intervención en las Cortes EFE

M. SERRADOR

«Castilla y León no necesita profetas del desastre ni inquisidores que nos fustigan con sus látigos», le espetó ayer el presidente de la Junta al procurador de Podemos y líder de la formación morada en la Comunidad, Pablo Fernández , a quien calificó de «Pablo Iglesias en pequeñito». Lo hizo durante el pleno de las Cortes de Castilla y León que volvió ayer a su actividad habitual con la primera sesión de control al Ejecutivo desde que se decretó el estado de alarma. Fue una pregunta del parlamentario de la formación morada a Fernández Mañueco sobre la actuación de su Ejecutivo durante la pandemia, la que encendió el debate. Un enfrentamiento que llegó después de que lunes, el vicepresidente del Gobierno de España, Pablo Iglesias, asegurase que lo ocurrido en las residencias de Castilla y León y de Madrid «es un auténtico escándalo, si no un crimen».

Con este escenario de fondo, Mañueco se encontró con una intervención de Pablo Fernández plagada de descalificaciones en las que le llegó a decir que «no está a la altura», «el cargo de presidente le viene grande» o «su ceguera es irreversible». Unas afirmaciones a las que sumó las de «ruin y miserable, por echarle la culpa al Gobierno» de los sucedido en las residencias cuando «ustedes (por la Junta) son los únicos responsables. «Hay que ser bellaco», añadió el líder de Podemos, aunque concluyó ofreciendo una «oposición leal» y se mostró dispuesto, a pesar de todo, «a conjugar el verbo construir».

El presidente de la Junta afeó la intervención de Pablo Fernández que «nunca decepciona», acostumbrado como ya está a su tono grueso y a «las recetas de todos los días de propaganda y demagogia». «No necesitamos la división entre buenos y malos, demócratas y antidemócratas», insistió Mañueco, quien reprochó a Pablo Fernández que juegue «a dividir y enfrentar» y le pidió que deje de representar al jefe de su partido.

Frente a eso, le propuso que defienda los intereses de Castilla y León y diga cuál es su postura ante la negativa del Gobierno a que la Comunidad gestione el Ingreso Mínimo Vital o sobre los privilegios por el pacto con Bildu. «Lo que no necesita Castilla y León es dividir; deje de insultar y hacer ruido», insistió Mañueco a Pablo Fernández , al que volvió a pedir que se sume al pacto para reconstruir la Comunidad y «si no quiere colaborar, al menos no entorpezca».

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