La llegada de personas a Castilla y León sigue al alza, pero no compensa la pérdida de población

Castilla y León arroja por segundo año un saldo positivo de gente de otras regiones

ICAL

Esta funcionalidad es sólo para registrados

El confinamiento motivado por la pandemia del Covid-19 cerró en casa a la población y abrió la mente a un cambio de vida, con búsqueda de espacios más abiertos, menos masificación y viviendas con posibilidad de salir algo más allá de la ventana. Y ahí, Castilla y León ha emergido como un destino de nuevos residentes. Por segundo año consecutivo, la Comunidad se sitúa como uno de los asentamientos preferidos de quienes deciden hacer la mudanza dentro de España , según la estadística de migraciones correspondiente a 2021 publicada por el INE . Es una de las cuatro autonomías en las que el pasado ejercicio continuó el saldo positivo en la migración entre comunidades tras el punto de inflexión marcado por 2020. Llegaron a Castilla y León 1.795 personas que cambiaron su domicilio dentro de las fronteras nacionales, siendo la quinta autonomía que más recibió. Se unen a ellas las 4.626 procedentes del exterior que también fijaron su residencia en la Comunidad.

Entre quienes llegaron procedentes de otras regiones y los que cruzaron las fronteras nacionales hacia el interior de los límites de Castilla y León, el censo aumentó en 6.421 personas . Sin embargo, pese a que el saldo migratorio vuelve a ser positivo para la Comunidad, no es suficiente para compensar el lastre que supone el saldo vegetativo negativo , que sigue arrojando más fallecimientos que nacimientos. El cálculo, un resultado negativo con 16.211 muertes más que nacimientos en un ejercicio que también en este aspecto está marcado por el incremento de decesos ligado al coronavirus y una nueva caída en los alumbramientos.

Por provincias, el saldo exterior es positivo en todas, con Salamanca a la cabeza. Sin embargo, en las migraciones interiores, Ávila y Segovia, las provincias más próximas a Madrid, son las que suman más: 853 y 466 personas más. Así, Castilla y León arrancó el año con 2.376.739 habitantes, lo que supone una nueva caída en el censo, del 0,42 por ciento, mientras que a nivel nacional se elevó ligeramente (0,7%) impulsada por la llegada de extranjeros.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación