Las defensas se centran en lavar la imagen de los acusados por el asesinato de la pequeña Sara

La novena jornada del juicio por el asesinato de la pequeña Sara en verano de 2017 se centró ayer en la Audiencia Provincial de Valladolid en los intentos de las defensas de ambos acusados, Davinia M.G., la madre de la niña, y su expareja sentimental, Roberto H.H., de presentarles como personas que llevaban una vida normal y, en el caso de Davinia, de demostrar que era buena madre y que se ocupaba de sus hijas .

Uno de las testigos que declaró ayer fue la expareja del acusado, con la quien mantuvo una relación de tres años, quien a insistió en que nunca tuvo ningún problema con Roberto H.H. Además, también dejó claro que ni ella ni su hija sufrieron malos tramos por parte del acusado . No obstante, reconoció que una vez terminada la relación por deseo suyo, le denunció tras comprobar que le había clonado el correo electrónico y el teléfono móvil, informa Ical.

También declararon varios amigos y conocidos de Roberto, que narraron que el acusado se dedicaba a la reparación de vehículos y que llevaba una vida normal. Y a petición de la defensa de Davinia, varios compañeros militares indicaron que en alguna ocasión la acusada les había comentado su preocupación por la investigación abierta por los Servicios Sociales.

Además, una vecina de la familia en Pedrajas de San Esteban la calificó como «buena madre» que estaba «pendiente y atenta de sus hijas» y una antigua compañera descartó que fuera una mujer violenta y fría .