Coronavirus: Burgos y Salamanca asumen que están abocadas al cierre por su «difícil» situación
El alcalde burgalés llama en un bando a «evitar» las reuniones de más de seis personas
Actualización: la Junta decreta el confinamiento en Burgos
Difícil», «complicada», «preocupante» e incluso «dramática». Distintas palabras para definir la misma situación ante el nuevo avance de los contagios por Covid-19 en Castilla y León. La sensación es la misma para toda la Comunidad y compartida por Junta y ayuntamientos de las nueve capitales, según coincidieron en expresar en la reunión telemática mantenida ayer entre el presidente del Ejecutivo autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, los alcaldes de las ciudades y el delegado del Gobierno, Javier Izquierdo, para «mantener la coordinación y reforzar la colaboración» entre administraciones y hacer frente al virus. Eso sí, con dos capitales, León y Palencia, confinadas perimetralmente y otras restricciones desde hace una semana y sin lograr bajar su tasa de incidencia de los 500 casos por cada 100.000 habitantes, hay otras dos que casi dan por asumido que en unos días se verán abocadas al cierre: Burgos y Salamanca. Sus alcaldes, Daniel de la Rosa y Carlos García Carbayo, respectivamente, acabaron la reunión casi dando por asumido que en unos días serán las siguientes en verse abocadas a ese paso atrás en la libertad de movimientos.
De la Rosa reconoció que la situación en la capital es «muy complicada» y «de no corregirse» la ciudad será confinada en los próximos días . «Hay un gran transmisión de casos positivos en la última semana», advirtió en su llamada a «intentar evitar» el cierre corrigiendo la tendencia, que arroja una incidencia de 406 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos catorce días -el parámetro que se mide, además de el porcentaje de positividad en las pruebas y la ocupación de la UCI-. Un apelación a la «corresponsabilidad» en la que «todas» las partes se tienen que implicar, subrayó De la Rosa, quien ayer dictó un nuevo bando «incisivo y duro en el tono para que se interiorice», además de recuperar los mensajes por megafonía para llegar lo máximo posible a la población. En él, advierte de que la situación epidemiológica en la ciudad «es muy preocupante y está evolucionando de manera negativa», por lo que si no se cambia la tendencia «de inmediato, estaremos, a corto plazo» en los parámetros que abocan al cierre. Cifras «desalentadoras» para cuya reversión llama al cumplimiento «imprescindible» y de manera «rigurosa» de las medidas sanitarias.
Salamanca
Y dado que, señala, el ámbito familiar es donde más se producen los brotes, recomienda incluso «evitar reuniones o encuentros» de «más de seis personas». Además, ante el «preocupante incremento» de contagios en la franja de edad entre 15 y 29 años, llamamiento «especial» a la «concienciación de nuestro jóvenes y menores». A ellos apeló también ayer el alcalde de Salamanca «porque se ha detectado un pico en la incidencia» en este tramo y «un aumento de la hospitalización». Pero la llamada es «a toda a sociedad» para que cumplan las medidas. Con 472,5 casos por cada 100.000 habitantes, García Carbayo reconoció ya ayer que es «difícil» revertir la situación de contagios, que va al alza y se aproxima a los límites que abocarían a su confinamiento. A principios de septiembre la capital charra -y la vallisoletana- vivió bajo restricciones, se doblegó la curva, pero el problema, advirtió el regidor, es que «esto no se ha consolidado» y en las últimas semanas ha vuelto a repuntar.
Concienciación
«Moderadamente alejada» de ese umbral se encuentra Valladolid (356 casos), por lo que el alcalde de la ciudad, Óscar Puente, quien fue muy crítico con las restricciones de septiembre, considero que mantener el nivel de actividad actual debe ser «suficiente estímulo» para que la ciudadanía se conciencie de seguir las normas, dijo en declaraciones recogidas por Efe.
Cumplir de forma estricta, como recomiendan los expertos, con las medidas que rigen en cada municipio y concienciación sobre la responsabilidad individual, además de «unidad» de acción, son los mensajes en los que incidió Mañueco a los alcaldes, a los que recordó su «imprescindible» implicación y agradeció su «esfuerzo» en esta batalla contra el virus. Todos coincidieron en la «preocupación» por los datos de los últimos días y los regidores reclamaron también campañas de concienciación.
Precisamente, el alcalde Palencia -con tasa de incidencia superior a 600-, Mario Simón, consideró en declaraciones a Ical que las medidas restrictivas son «adecuadas y suficientes si se cumplen». Desde Segovia, su alcaldesa, Clara Luquero, incidió en la importancia de la «colaboración entre instituciones» como la vía «más eficaz» para luchar contra el Covid-19. Aunque Segovia -muy castigada en la primera ola- presenta ahora unos datos de «relativa tranquilidad» con tasa de 201, insistió en no «fiarse» ni relajarse y avanzó que si llegan a superarse los umbrales marcados los acatarán «sin cuestionar nada». Responsabilidad para «cortocircuitar» la cadena de contagios pidió el soriano Carlos Martínez, la ciudad con la incidencia más baja (155) tras el golpe del primer impacto. Colaboración y «disposición» brindó también el abulense Jesús Manuel Sánchez Cabrera.