Economía
Amenazan con paros en las gasolineras si no se vela porque todas tengan personal
Sindicatos y patronal denuncian que dos meses después de la entrada en vigor muchas estaciones siguen sin ser atendidas
El ultimátum está sobre la mesa. O la Junta «vela» por el cumplimiento de la orden autonómica que exige desde finales de enero que todas las gasolineras tienen que estar atendidas por personal siempre que estén abiertas o los sindicatos, de la mano del sector de las tradicionales estaciones de servicio, comenzarán con una serie de movilizaciones entre las que no se descarta que haya paros de suministro. Así lo advirtieron ayer las partes implicadas en la amenaza, que lamentaron que tres meses después de que la norma entrara en vigor sigue habiendo surtidores en funcionamiento que no cuentan con trabajadores que asistan en los mismos, ni hay «intención» de hacerlo, saltándose algunos propietarios la normativa autonómica -que tratan de revertir- al amparo de que entienden que sus negocios sí cumplen con las leyes estatales.
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«Hasta aquí hemos llegado», aseguraba ayer el secretario general de CC. OO. de Industria de Castilla y León, Gonzalo Andrés Díez, quien consideró que se «ha dado tiempo suficiente» para que las estaciones de servicio desatendidas se adecuaran al nuevo marco legal. En concreto, los plazos arrancaron en octubre de 2016, cuando se publicó en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) la modificación del Estatuto de los Consumidores de Castilla y León del año 95, que introducía la exigencia de que un trabajador estuviera presente en el negocio cuando estuviera operativo para garantizar la atención a personas con discapacidad, así como por motivos de seguridad y de garantía de asistencia hacia los consumidores. Se dieron entonces tres meses de adaptación, que se cumplieron en enero, para que toda gasolinera que no contara con personal lo contratara. A la vista de que «no se cumplían», los sindicatos y la patronal se remitieron a la Dirección General de Consumo de la Junta reclamándole una campaña específica y a las delegaciones provinciales del Ejecutivo autonómico para que intensificaran el control. Como «no surtió efecto», enviaron una carta al presidente autonómico, Juan Vicente Herrera, de la que -afirman- no han obtenido respuesta.
Más de 800 estaciones en la Comunidad
«Si en un breve espacio de tiempo no tenemos respuesta nos plantearemos las movilizaciones y posiblemente paros» en las estaciones de servicio al uso, más de 800 en la Comunidad, advirtieron los sindicatos y la Agrupación de Vendedores al por menor de Carburantes y Combustibles de Castilla y León (Avecal), respaldados ayer por los secretarios generales de CC.OO y UGT en Castilla y León, Ángel Hernández y Faustino Temprano, y el presidente de Cecale, Santiago Aparicio.
A principios de año, cuando entró en vigor la norma, se cifraban en torno a las 120 las gasolineras desatendidas en Castilla y León. No se disponen de datos de cuántas se han adaptado a los cambios y cuántas no, pero reconocen los sindicatos que ha habido estaciones que sí lo han hecho, algunas que a medias -porque el personal que se encuentra en las gasolineras no es específico para ese puesto o están dado de alta en «hostelería»- y otras que se han negado y que «públicamente han dicho que no iban a cumplir», explicaron en relación a un empresario que trasladó su negativa a contratar personal.
Siete inspecciones de la Junta
Desde la Junta de Castilla y León explicaron ayer que se han efectuado siete inspecciones a gasolineras desatendidas desde la entrada en vigor del cambio de normativa a finales del pasado mes de enero, sin que se haya procedido en ninguno de los casos a dictar aún alguna resolución. Las estaciones controladas están dos en Salamanca, cuatro en Soria y una en Valladolid. De todas ellas se ha levantado acta y se están tramitando. Las sanciones oscilan entre 3.000 y 15.000 euros, y podrían elevarse hasta los 600.000 si hay reincidencia.
