Política
Un 2016 de «incertidumbres»
Financiación, empleo, situación internacional, ordenación... son múltiples las incógnitas para definir el futuro de la Comunidad
![El presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, regresa a su escaño tras intervenir esta semana en las Cortes](https://s1.abcstatics.com/media/espana/2016/07/03/herrera-regreso-escano-k4vF--620x349@abc.jpg)
CLAVE. Con mayúsculas y en varios sentidos. Así se presentan los próximos meses, decisivos más allá de ver cómo cierra este 2016. Ya lo advirtió el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, en su intervención este miércoles en las Cortes en el Debate sobre el Estado de la Comunidad, y el escenario de múltiples incertidumbres abiertas lo confirma. Desde el plano económico al político son varias las incógnitas que pueden hacer que la dirección de la Comunidad vaya en un sentido o en otro. Interrogantes que dependen no sólo de asuntos y decisiones más cercanos y del ámbito autonómico, sino también del nacional e incluso de la esfera internacional.
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Empleo, marcha de la economía, arcas públicas, comercio exterior, ordenación del territorio... El abanico es amplio.
Financiación Autonómica
Criticado desde que se puso en marcha en 2009 por su «insuficiencia» para cubrir los costes de los grandes servicios públicos en Castilla y León, el modelo de financiación autonómica es una de las cuestiones que Herrera urge a reformar y abordar. De él dependen en buena medida la marcha de los grandes servicios públicos de la Comunidad, el «corazón» de la actividad autonómica, pues con él llegan las transferencias, los dineros, para cubrirlas.
Y en estos años de vigencia acumula millonarios desequilibrios. Unos 500 millones de euros por ejercicio es el desfase denunciado por el Ejecutivo autonómico que existe entre lo que llega desde el Estado y lo que cuesta a las arcas regionales hacer frente sólo a los tres grandes servicios públicos (sanidad, educación y servicios sociales). Eso sin añadir otros capítulos. De ahí que Castilla y León reclame su reforma y que se atiendan las características y peculiaridades de la Comunidad a la hora del reparto, tal y como recoge el Estatuto de Autonomía.
Pasada la última legislatura sin abordarse la prometida reforma por la carencia de dineros a repartir debido a la pertinaz crisis, ahora se está pendiente del próximo Gobierno central, que tendrá entre sus deberes abordar el cambio de este sistema. En Castilla y León ya se ha dado un paso para intentar hacer valer con más fuerza sus reclamaciones. El 13 de abril todos los partidos con presencia en las Cortes (PP, PSOE, Podemos, Ciudadanos, IU y UPL) aprobaron una Proposición No de Ley en la que fijan la postura unánime de la Comunidad en este sentido y esta semana han dado un paso más al instar a la Junta que busque alianzas con comunidades con características similares, de modo que su voz gane peso en la negociación.
Que ese nuevo modelo esté listo para este año parece una misión casi imposible, por lo que no se podrá contar con unos ingresos diferentes por esta vía de cara a los próximos Presupuestos.
Presupuestos
Con un Gobierno de la Nación en funciones desde hace más de seis meses y el paso por las urnas el pasado domingo, queda pendiente la conformación del nuevo Ejecutivo. Una cuestión que trasciende más allá de la elección del presidente. También en Castilla y León tiene repercusiones, y no sólo por la necesidad de contar con un interlocutor en La Moncloa para abordar los asuntos que de ambos dependen o de competencia nacional que afectan a la Comunidad.
El verano es un tiempo clave para la elaboración de los Presupuestos del Estado, de los que también dependen los de Castilla y León, pues en ellos se fijan las transferencias que recibirá la región.
Brexit
La aprobación, por la mínima, del Reino Unido de salirse de la Unión Europea ha hecho tambalearse los cimientos del proyecto comunitario y, aunque en general hay llamada a la calma, diversos sectores ya han advertido de las «incertidumbres» a mayores que se ciernen sobre la economía. No en vano, es el segundo país al que exporta Castilla y León, varias empresas de aquí tienen fábricas allí, es el segundo territorio que envía más turistas extranjeros a la Comunidad y el lugar al que más gente emigró el pasado año. Juan Vicente Herrera calificó como «enormemente negativo» el Brexit.
Ordenación del territorio
Aprobado ya el 80 por ciento del desarrollo de la Ley de Ordenación del Territorio que en septiembre de 2013 sacaron adelante las Cortes con el apoyo de PP y PSOE, queda el último empujón. Pero llega en cuesta. Y algo empinada. El mapa de Unidades Básicas rurales se está atragantando algo más de lo esperado. El proceso de consulta y diálogo ha sido largo y amplio. Municipios, diputaciones y cualquier interesado ha podido hacer sus aportaciones, muchas de las cuales ha tenido en cuenta la Junta para trazar el mapa definitivo propuesto e incluso «flexibilizar» -en palabras del propio Herrera- la ordenación en el ámbito rural, garantizando, por ejemplo, la «pervivencia» de las actuales mancomunidades que desarrollan «con eficacia» sus competencias y funciones, además de los servicios esenciales autonómicos «con la misma intensidad».
Pero resta que el proyecto llegue al Parlamento para su debate y aprobación. La intención es que tenga las bendiciones este año, pero para ello necesita el «ok» de dos tercios de la cámara, esto es, 56 de los 84 procuradores, por lo que los únicos votos del PP (42) son insuficientes. Tiene que garantizarse de nuevo el apoyo del PSOE, que está siendo especialmente beligerante con este asunto, después de que en el mapa de servicios de los municipios de más de 20.000 habitantes sí votó a favor.
Incluso el CES (donde están presentes sindicatos, patronal, expertos y diversos colectivos) ha urgido a los grupos políticos al entendimiento y aprobar esa parte que resta de la ordenación del territorio.
PIB
La marcha de la economía circula bajo la amenaza de no crecer a la velocidad que alcanzó en 2015, cuando cerró con una aceleración del 3,1 por ciento, según la contabilidad de la Junta y del 2,9, aplicados los cálculos del INE. De hecho, las previsiones para este ejercicio ya eran inferiores a las del pasado: 2,7 por ciento frente al 2,9 estimado para 2015. Y el primer trimestre puede haber sido una pista. Aunque mínimamente, la desaceleración se asomó al PIB regional.
Empleo y economía
A la espera de unos datos que junio que suelen acompañar al desempleo, las «incertidumbres» también se ciernen sobre el futuro laboral, íntimamente ligado a la marcha de la economía y, en estos momentos, también pendiente de la política. Ya lo advirtió Herrera, en el futuro más inmediato puede abrirse un escenario de «crecimiento sólido y estable» o «suceder justamente lo contrario».
La lucha contra el paro es, por ello, la «principal prioridad». El objetivo y obsesión, para dejar atrás las cifras de más de 183.000 parados y un 18,3 por ciento de tasa de desempleo que, aunque inferiores a las de meses atrás y por debajo de la media nacional, siguen siendo elevadas y muy alejadas en aquellos tiempos anteriores a que a finales de 2007 irrumpiese la crisis, cuando se rozaba el pleno empleo. La meta marcada por la Junta en este sentido es alcanzar el millón de ocupados en Castilla y León al final de esta legislatura autonómica (2019).
Reformas políticas
Entre los compromisos de Herrera, la reforma del Estatuto de Autonomía. Entre otros objetivos, avanzar en nuevos pasos para la demandada regeneración política. Un proceso normativo que necesita de un amplio consenso político que no se aventura fácil, con el añadido de que, además, debe pasar el filtro de las Cortes Generales, donde la también mayor pluralidad política supone, a priori, un obstáculo más. Por el momento, la Junta ha avanzado en proponer cambios en este sentido (limitación de mandatos, debates obligatorios en elecciones, incompatibilidades para altos cargos...) por la vía legal que también deberán recibir el visto bueno de las Cortes, donde necesita a otros partidos.