Cáritas ayuda a una familia que ha perdido su negocio en Valmojado

Una familia de Valmojado ha perdido su negocio (fábrica de cuadros y molduras) tras el paso de la borrasca Filomena. Además de parte de la nave y la tienda, en las que se hundió el tejado por el peso de la nieve acumulada, Jesús, Eva y sus dos hijos, de 16 y 14 años, tuvieron que abandonar la vivienda ante el peligro de derrumbe en la noche del sábado 9 de enero.

«Después de disfrutar de una estampa tan inusual en Valmojado, inmediatamente fuimos conociendo situaciones y familias a quienes este temporal le está poniendo las cosas muy difíciles: los que necesitan tratamiento médico urgente, enfermos... y una noticia que nos heló el corazón, nuestra hermana y vecina Eva Cristina Martín-Urda, conocida por Eva Cuadros, había perdido su nave y su casa. El tejado no resistió el peso de la nieve y se vino abajo: ha perdido la nave, parte de la tienda y la vivienda está en riesgo de derrumbarse », escribió el párroco de Santo Domingo de Guzmán, Quique del Álamo.

Jesús, Eva y sus dos hijos pronto fueron acogidos en casa de unos amigos y en cuanto se tuvo noticia desde la parroquia se le ofreció todo tipo de ayuda. «Buscamos una casa de alquiler que se pagará desde Cáritas Parroquial de Valmojado y se les va a ayudar también económicamente para poder limpiar las ruinas de la nave y la casa y más adelante poder reconstruir», explicó el párroco a ABC.

Desde la parroquia se ha abierto una cuenta donde poder hacer donativos para esta causa, aunque también recogen ayudas en efectivo en la iglesia.

El número de cuenta es: ES67 3081 0188 2114 2314 4615, el titular de la es la parroquia de Valmojado, y como concepto hay que poner Ayuda Eva Cuadros.

«Es el momento de mostrar una vez más nuestra caridad hacia esta familia que sufre más duramente las consecuencias del temporal. Valmojado es un pueblo que responde de maravilla ante las dificultades», explicó Del Álamo a ABC, y añadió que la parroquia cuenta con un grupo de Cáritas que ayuda mensualmente a unas 25 familias con alimentos, ropa o pago de alquiler, una cifra que subió hasta las 60 familias al inicio de la pandemia porque la gente se quedaba sin trabajo o entraban en un Erte y tardaron en cobrar la mensualidad», subrayó el sacerdote.

«Jesús y Eva están muy triste por lo que ha pasado, pero a la vez agradecidos, y son conscientes de cómo se vuelca la gente en Valmojado. Esperamos recosntruir su casa y recuperar parte del material de la nave», concluyó Quique del Álamo.