«Pompi no mató una mosca en su vida; era muy noble, muy humilde, un cacho de pan»
Andrey, primo del joven de 21 años que murió en Toledo, cree que el homicida es un psicópata. Relata a ABC cómo fue el ataque mortal de un tipo con una máscara de calavera y un arma blanca, que todavía no ha sido detenido
Andrey está destrozado, como toda la familia de Lorenzo Pompiliu Cazacu Motoi, el chaval de 21 años al que un hombre mató el pasado fin de semana en Toledo. «Pompi, como le llamábamos desde niño, no había matado una mosca en su vida. No sabía lo que era pegarse. Era muy noble, muy humilde, un cacho de pan. No tengo palabras para describirlo; no se merecía esto », afirma a ABC Andrey, primo de Lorenzo, como lo conocían sus amigos. «Es lo que más me duele; si mi primo fuera una mala persona, metido en cualquier cosa, pero no...».
Español de familia rumana, Pompi era un «friqui de la informática, era un cibernético» , cuenta Andrey. «Estaba mucho en casa, con su ordenador, con sus juegos, con sus amigos. Era un loco de la cibernética», añade su primo.
Pompi habría cumplido 22 años el 30 de abril. Pero la madrugada del domingo un criminal con un arma blanca se cruzó trágicamente en su vida . «Mi primo estaba en casa con unos amigos, como cualquier chaval de su edad. Estaban tomándose algo y Pompi dijo a uno de sus mejores amigos que lo acompañase a la calle para dar un paseo, porque necesitaba que le diera el aire... Lo que es la mala hora », se lamenta Andrey.
«Ocurrió enfrente de su casa -relata-. Pompi y su amigo iban andando hablando de sus cosas por el parque. De repente, se encontraron con ese mierda, que llevaba una máscara de calavera, la capucha puesta y un machete en la mano». «Les dijo que le dieran todo lo que tuvieran. El amigo le pidió que se tranquilizara, que no hacía falta llegar a eso -continúa-. [El individuo] golpeó con el machete en el suelo para demostrar que era de verdad, y mi primo le sacó un billete de diez euros y su teléfono móvil».
«Luego Pompi le preguntó cuánto dinero le había dado porque estaban en un lugar oscuro. [El criminal] le dijo que diez euros y Pompi le pidió que se lo devolviera para entregarle uno de cinco euros. Para que veas la inocencia de mi primo... -apunta Andrey-. En esas, [el homicida] le dio un machetazo en el cuello e hizo un corte al amigo en una oreja y en la cara. ¡Menos mal que se echó para atrás!».
El amigo de Pompi «está traumatizado» , coge aire Andrey. «Un poco más y tampoco lo cuenta. El mierda fue también a tirarse a su cuello», asegura el primo de Pompi, que tiene claro que «el sujeto no iba a por los diez euros. Si vas a por ellos, los coge y sales corriendo. Es un psicópata», que no ha sido detenido todavía.
Sobre el homicida, Andrey dice que saben muy poco. Podría ser de origen latino por su voz y es más bajo que Pompi y su amigo, «dos tíos grandes de más de un metro y ochenta centímetros de altura».
«Estamos destrozados por la forma en que ha ocurrido» , asevera Andrey, que ha publicado la esquela de su primo en su página de Facebook. «Apenas salía de su casa y, para una vez que sale, por así decirlo, un loco, un hijo de puta, acaba con su vida». «Mi tío ha hablado con el Ayuntamiento para poner una cruz en el lugar donde murió», desvela el primo de Pompi. Su vida se truncó funestamente unas horas antes de la noche de Halloween , la víspera de Todos los Santos y el día que Lorenzo recibió sepultura en el cementerio de Toledo.
Noticias relacionadas