ARTES&LETRAS CASTILLA-LA MANCHA

Diario de un jubilado en Nueva York (71): Esplendor de cenizas

«Cerramos la puerta y guardamos la llave en el archivo del júbilo»

Un ciclista en Prospect Park, en el barrio de Brooklyn, Nueva York H.B.

POR HILARIO BARRERO

Entra el verano igual que irrumpe el mar en nuestras vidas y abre las puertas del parque que se llena de un incontrolable fulgor. Todo se desborda: la pradera de un verdor umbrío , los árboles reflejando su sombra en el camino donde las ardillas miran al paseante con ojos inquisitivos, acuden los perros al lago y surca el aire una cometa, la de siempre, la que, como el amor, nunca muere, la que vuela alta, libre, y es pájaro y nube, y es proclama gozosa de otro verano que será el principio de un amor y el final de otro : el estreno de una mirada y el escalofrío de un beso, las prisas y las pausas.

Cerramos la puerta y guardamos la llave en el archivo del júbilo, recordando el tiempo que estuvimos poniendo cimientos a una página que hablaba de una ciudad lejana y cercana, triste y equívoca , una ciudad que a menudo oprime y a veces te da alas.

Se irá el verano y permanecerá el amor, la hierba se secará y volverá a crecer, el lago perderá el eco de las algas que regresarán a enredarse en lo oscuro, se irán al sur pájaros extranjeros y volverán a firmar con la uve doble de su caligrafía húmeda, los lesionados por el amor buscarán un lugar lejano y escondido donde serán devorados por dragones de fuego; otros, los olvidados, un territorio donde enterrar sus huesos y algunos buscarán una tierra donde esparcir sus cenizas.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación