Solo 17 cuarteles de la Guardia Civil de los 239 en Castilla-La Mancha abren al público las 24 horas, según la AUGC
Hay puestos que no pueden sacar más de 3 patrullas a la semana por la falta de efectivos, afirma la asociación en un informe sobre la situación del instituto armado en la región, donde más del 90% de su geografía es rural
El sábado dos individuos fueron arrestados después de robar de madrugada armas, munición y uniformes en el cuartel de Villafranca de los Caballeros, sin personal por la noche
La madrugada del pasado sábado, dos individuos asaltaron el cuartel de la Guardia Civil en Villafranca de los Caballeros (Toledo) cuando estaba cerrado al público y sin personal. Esta pareja, españoles de 41 y 43 años, robó una caja fuerte, dos armas oficiales, un arma particular, munición y uniformes. Pero muy lejos no llegaron porque fueron detenidos en la cercana localidad de Camuñas, horas más tarde, gracias a un amplio despliegue policial. Ya están prisión, provisional, comunicada y sin fianza, como presuntos autores de un delito de robo en casa habitada y de otro de tenencia ilícita de armas.
Pero, ¿podría volver a ocurrir un asalto en otro cuartel de la Guardia Civil en Castilla-La Mancha? En la región donde más del 90% de su geografía es rural, solo 17 puestos de los 239 están abiertos al público las 24 horas, según un estudio de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) realizado en agosto. «Esto implica que solamente un 7 por ciento están operativos cien por cien los 365 días del año» , se indica en este informe de la asociación, que recalca que la mayoría de esos 17 cuarteles con personal por la noche se encuentra en la provincia de Toledo, donde hay 72 puestos.
Por eso piden una reorganización de efectivos y de los cuarteles, con menos puestos y más especialidades, con instalaciones nuevas, modernas y funcionales, «adaptadas a las necesidades del siglo XXI, abiertas las 24 horas para atención al ciudadano». Y con unidades de no menos de 30 agentes en la calle porque «un guardia civil sale de servicio y se recorre siete u ocho pueblos de la demarcación» .
Poblaciones 'vulnerables'
En Castilla-La Mancha, la Guardia Civil debe vigilar 919 municipios, con sus pedanías, fincas, parques naturales, ríos, embalses y otros parajes. Pero la presencia de patrullas de seguridad ciudadana es «deficitaria», lo que «conlleva una falta de prevención de la delincuencia», según la AUGC, que lamenta la falta de inversión de los distintos gobiernos de España. «Hay puestos que no pueden sacar más de tres patrullas a la semana por la falta de efectivos» y «se establecen núcleos operativos que atienden localidades distantes entre sí entre 40 y 90 kilómetros», aseguran.
En la región muchos robos suceden de noche y en horarios de poca actividad, como ocurrió en el del cuartel de Villafranca de los Caballeros el sábado. También en domicilios sin habitar o con moradores, casas de campo y naves agrícolas, por lo que los ladrones buscan poblaciones 'vulnerables', con poca presencia de patrullas de la Guardia Civil .
«Cualquier noche pueden estar trabajando de media entre 16 y 30 agentes en cualquier provincia, lo que significa entre 8 y 15 patrullas» , añaden desde esta asociación, que reclama también más guardias en las calles y más material, como chalecos antibalas, espráis de defensa, guantes anticortes, defensas extensibles, pistolas táser y fundas de pistola antihurtos. No se olvidan de pedir armeros de seguridad blindad0s para dejar el arma oficial en el cuartel, como sucede en las comisarias de la Policía Nacional y en los edificios de las policías locales.
Vehículos con más de 400.000 kilómetros
Desde la AUGC reclaman igualmente dotar a los puestos principales de escudos y cascos antidisturbios, además de la renovación de vehículos oficiales que utilizan para patrullar por la región. La media de antigüedad de sus automóviles supera los diez años , con más de 400.000 kilómetros en muchos casos y que han sido conducidos por varias manos. Además, la casi totalidad no tienen la tracción 4x4, a pesar de que el ámbito de actuación de la Guardia Civil en Castilla-La Mancha es principalmente rural.
En el informe también se subraya otro dato: «Una mañana de cualquier día de la semana, en la sede de las comandancias de las capitales de provincia de Castilla-La Mancha, puede haber trabajando entre 50 y 70 agentes que no se dedican a las labores operativas de calle o de investigación, sino labores burocráticas, apoyo al mando y de ejercicio del mando».
Por eso desde esta asociación se concluye que el actual modelo policial está basado en un sistema de gestión y no en un sistema operativo , por lo que muchos profesionales de los cuerpos oficiales (Guardia Civil y Policía Nacional) se dedican a «funciones burocráticas», que «son necesarias», pero «dejan de realizar su verdadera función policial de seguridad ciudadana», indica en su informe.
La asociación ha entregado su estudio sobre la Guardia Civil en Castilla-La Mancha al delegado del Gobierno en la región, Francisco Tierraseca , y al presidente del PP en esta comunidad autónoma, Francisco Núñez , además de recibirlo también representantes de otros partidos políticos.
Page y los arreglos de los cuarteles
En febrero de 2019, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ofreció al Gobierno central un acuerdo para financiar arreglos en los cuarteles de la Guardia Civil de la región, donde la gran mayoría tiene más de 50 años de antigüedad. Pero exigía una condición: que el Estado incrementase la plantilla de agentes en al menos 300 guardias civiles más. «Lo que debería hacer el señor Page es arreglar los cuarteles en lugar de esperar a que aumenten los agentes, un incremento que no se producirá ni a corto ni a medio plazo porque el catálogo de la Guardia Civil es el que es, de unos 4.800 agentes en Castilla-La Mancha», sugiere un miembro de la asociación.
« ¿Que si podría volver a suceder lo de Villafranca en otro puesto de la región? Es factible. En un cuartamiento de Granada ya entraron para robar armas , aunque esto no sucede cada mes... Pero no nos enfrentamos al típico delincuente que tiene miedo. Como saben que está el cuartel cerrado, pues... Igual que entran en nuestros cuarteles, en otros lugares no les cuesta tanto porque al delincuente profesional y violento le da lo mismo », explica un guardia civil con una amplia trayectoria.
«Si no quieren tener los cuarteles abiertos, que los doten de un circuito de videovigilancia y con alarmas», propone ese agente. «Mientras se lleven las pistolas y podamos detenerlos, bien. Pero, como el día de mañana un delincuente robe una pistola reglamentaria de un cuartel y con ese arma mate a una persona, imagínese...».
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