Caixabank instalará cajeros en 33 pequeños pueblos de Guadalajara a partir de mayo
La entidad bancaria se ha impuesto a Ibercaja en el concurso público sacado por la Diputación, con un presupuesto de licitación de algo más de cuatro millones de euros
Caixabank instalará a partir de mayo cajeros automáticos en 33 pequeños pueblos de la provincia de Guadalajara que se habían quedado sin este servicio básico. La entidad bancaria se ha impuesto a Ibercaja en el concurso público que la Diputación sacó a licitación por algo más de cuatro millones de euros y tendrá la exclusividad durante un mínimo de cuatro años. De esta forma, la Diputación pone remedio a un problema que sufre el medio rural , donde desde hace años se viene detectando una progresiva desaparición de cajas y bancos.
El diputado de Obras y Servicios, Ramiro Magro, ha explicado a EP que, antes de sacar el proyecto a licitación, visitaron los pueblos para evaluar la ubicación idónea y la obra a realizar en cada uno de ellos. Una de las premisas es que el local donde se instalará cada cajero tiene que ser propiedad del Ayuntamiento, además de contar con conexión eléctrica y de datos. En algunos municipios, la obra ha supuesto un coste mínimo porque anteriormente ya había una entidad bancaria instalada en ese mismo punto, mientras que en otros el gasto ha sido más elevado. Sin embargo, en ningún caso esto ha sido motivo de discriminación, asegura el diputado.
Una vez que se firme el contrato entre la Diputación y Caixabank, este tendrá que estar en exposición pública durante 15 días y la idea es que en tres meses, es decir, en agosto, ya estén instalados los 33 cajeros . En el pliego se establecía que los cajeros deben disponer de retirada de efectivo, posibilidad de realizar ingresos con retención de billetes falsos, lectura y actualización de libretas bancarias, transferencias entre cuentas, pago de tributos gestionados por la Diputación y posibilidad de pago de impuestos autonómicos y estatales, posibilidad de pago de multas, recarga de móviles y recuperación de tarjetas capturadas, que deberán ser remitidas a la oficina bancaria emisora de la tarjeta.
Además, los cajeros deberán ser nuevos y permanecer en perfecto estado de conservación durante los cuatro años de vigencia del contrato, correspondiendo a Caixabank su mantenimiento y limpieza. La disponibilidad de los equipos deberá estar operativa durante las 24 horas del día, todos los días del año, y tendrán que estar adaptados para personas con discapacidades físicas, siendo accesibles para sillas de ruedas y contando con menús adecuados para personas con problema de visión como ayuda guiada por voz, conexión por auriculares y teclado en Braille. Asimismo, deberán estar dotados de cámara de seguridad, lector para cualquier tipo de dispositivo (tarjeta, móvil, reloj o pulsera), unidad de escáner para lectura de códigos de barra y unidad de impresión de recibos.
Un comité de seguimiento vigilará el uso de estos cajeros. «Nuestra implicación con los pueblos es total», concluye Ramiro Magro.
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