Las dos realidades de La Palma: una mitad de la isla prepara la Navidad, la otra, desentierra sus casas
Mientras en el lado oeste ya preparan las luces navideñas y engalanan las calles, en la vertiente oeste la ceniza lo cubre todo y luchan contra un volcán
La Palma está dividida por la dorsal montañosa que divide este y oeste , ahora más que nunca. Esta región de Cumbre Vieja y Cumbre Nueva protege al lado este de la isla de la desgracia que se vive en el oeste. Mientras en un lado luchan contra un volcán que ya ha arrasado casi mil hectáreas, con una lluvia de ceniza que lo cubre todo, terremotos constantes y una calidad del aire peligrosa, en el lado este tratan de volver a la normalidad , en un contexto de recuperación económica y de llegada de fiestas navideñas.
Dos realidades en lo que parecen dos islas diferentes separadas por apenas 25 kilómetros de carretera . En el lado este de la isla han sufrido episodios de lluvia de ceniza y concentraciones de gases, pero la afección es más emocional que física o visible. La Palma, con en torno a 85.000 habitantes, se mantiene unida en el dolor , pero se lleva de diferente forma. Si no fuera por la información, las redes sociales y los medios de comunicación, podrían vivir ajenos a la tragedia de sus hermanos.
Ya se colocan las primeras luces en las calles , se visten los escaparates y empiezan las compras para las fechas navideñas, en lo que es una realidad completamente contrapuesta a lo que viven sus vecinos en el otro lado. Abstraerse del volcán es imposible, pero a la vez que unos viven el mayor desastre natural del último siglo otros tratan de no dejar caer la economía , transmitir la idea de isla segura, recuperar el turismo, con algunas ideas que se convierten en ciertamente incompatibles con quienes tratan día a día de desenterrar sus casas bajo varios centímetros de cenizas.
En redes sociales, esta situación ha colocado a los vecinos en dos opiniones diferentes, uno consideran que no se puede perder ni la ilusión ni la economía que da de comer al lado este de La Palma, otros consideran que es una falta de empatía y un derroche de dinero.
Con el ojo puesto en el otro lado, este año la recuperación a la que se enfrenta la isla en los próximos meses será muy diferente según el municipio.
Noticias relacionadas