De Odesa a Canarias: El viaje de huida de Olha, Olena, Anhelina y Zlata
Estas cuatro chicas ucranianas han llegado a la capital grancanaria después de un viaje desde Odesa, una de las ciudades más asediadas por las fuerzas de Rusia
Se llaman Olha, Olena, Anhelina y Zlata , y por fortuna ya son rostros habituales en el centro de natación Metropole, en Las Palmas de Gran Canaria. Aquí tratan de hacer una vida normal y recuperar el día a día después de que una guerra se les cruzase en sus vidas .
Estas cuatro chicas ucranianas han llegado a la capital grancanaria después de un viaje desde Odesa , una de las ciudades más asediadas por las fuerzas de Rusia, y en esta ciudad isleña al fin pueden respirar tranquilas. Su estancia es gracias a su ' ángel de la guarda ', Beatriz López Cantero, que es socia de este club deportivo y que les ha dado un hogar seguro a salvo de las bombas de las fuerzas de Moscú.
Ahora, tras varios meses de agonía bélica, las cuatro recorren las instalaciones en busca de la actividad que mejor se adapte a sus circunstancias, con el objetivo de volver a una vida normal tras la huída de la guerra.
Olha, Olena, Anhelina y Zlata vivían en Odesa, una de las grandes ciudades de Ucrania y unos los principales objetivos de la ofensiva rusa . La importancia de la ciudad en los planes de Putin se levanta a partir de dos características muy particulares: su puerto es la salida principal de Ucrania al Mar Negro y la mayoría de sus habitantes hablan ruso.
Odesa fue atacada por barcos enemigos, por primera vez, el 22 de marzo . Durante este tiempo, la solidaridad se ha desbordado en Europa para dar cobijo a aquellas personas que escaparon del conflicto. Entre estos brazos abiertos están los de la canaria Beatriz López Cantero, que las ha acogido en casa.
Olha Kondrashova vino acompañada de su abuela, Olena, y de sus dos hermanas, Anhelina y Zlata. En el club se vuelcan para que se sientan en casa, como ha asegurado el presidente Alberto Santana. Además, Alena Popchanka, entrenadora de la sección benjamín de natación dio la bienvenida a las jóvenes y se mostró disponible para facilitar la adaptación «al idioma, a las instalaciones y a cualquier duda».
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