Sucesos
La oscura religiosidad del asesino múltiple Igor el Ruso
Siempre lleva consigo un ejemplar de la Biblia. En su equipaje, los rosarios compartían espacio con pistolas y cuchillos
Norbert Feher, apodado Igor el Ruso , el asesino múltiple que en diciembre mató a tiros a un ganadero y a dos guardias civiles en una masía turolense, es un criminal de largo curriculum, perseguido por crímenes cometidos previamente en Italia y un prófugo de viscosos contactos con el crimen organizado internacional. En su oscura personalidad se enredan su perfil asesino con extrañas obsesiones religiosas en un individuo de sanguinario historial .
En la cárcel de Ferrara (Italia) la frialdad de este exmilitar serbio contrastaba con la religiosidad de la que hacía gala. Era asiduo a las misas carcelarias y era conocido por ello no solo entre sus compañeros de penal sino también por el propio sacerdote del presidio .
Tras ser detenido por el triple crimen de Albalate del Arzobispo (Teruel), Igor el Ruso fue trasladado a una celda de máxima seguridad en la cárcel zaragozana de Zuera . Nada más ingresar en esta prisión aragonesa, pidió un ejemplar de la Biblia para leerlo en su celda .
Ahora, la investigación de los efectos que portaba cuando fue cazado por la Guardia Civil, muestran de nuevo esa extraña combinación de perfil místico y criminal que se funden en Igor el Ruso. Entre los abundantes efectos que le intervinieron apareció una biblia escrita en italiano, cuatro rosarios, una medalla de la Virgen y un crucifijo , junto a cuatro pistolas, munición y varias navajas.
Todo eso iba en las múltiples bolsas con las que Igor el Ruso salió huyendo tras asesinar al ganadero José Luis Iranzo y a los guardias civiles Víctor Romero y Víctor Jesús Caballero. Hace escasos días, mes y medio después de aquel triple crimen, las fuerzas de seguridad han dado con la guarida en la que se ocultó Igor el Ruso en los días previos a aquellos asesinatos -que tuvieron lugar, además, un par de semanas después de que tiroteara y dejara malheridos a otros dos lugaresños que se toparon con él en otra masía-.
Esa última guarida de Igor el Ruso en los montes que median entre Albalate y Andorra (Teruel) era un viejo corral, abandonado. Allí se ha encontrado otra pistola más, una Beretta que estaba inutilizada porque había fallado un disparo y el cañón estaba obstruido por una bala percutida. Ahora se trata de comprobar si esa pistola está relacionada con otros hechos criminales ocurridos dentro o fuera de España.
Noticias relacionadas