Socialistas y ERC, pacto de necesidad

Desde el mismo momento en que el PSC normalizó institucionalmente a ERC, firmando dos tripartitos autonómicos entre 2003 y 2010, y José Luis Rodríguez Zapatero priorizó sus pactos con los independentistas, a partir de ese mismo 2004, el PSOE en el Congreso y el PSC en el Parlamento catalán tienen fijada la mirada en ERC como su socio imprescindible para cualquier operación política. En Barcelona, los socialistas capitaneados por Miquel Iceta sueñan con un resultado electoral que les permita sumar con ERC y los comunes. Su única opción de recuperar la Generalitat pasa por ahí —descartado por ellos mismos un hipotético tripartito constitucionalista con Cs y el PP—. En Madrid, Pedro Sánchez solo puede repetir en La Moncloa si tras el 10-N suma con la formación de Oriol Junqueras , líder de ERC y condenado por sedición a trece años de prisión y trece de inhabilitación para cargo público.

Pese a que de vez en cuando surgen voces, tanto en la capital de España como en Barcelona, que señalan a ERC como un partido que quiere la estabilidad del Gobierno (voces de sirena de Gabriel Rufián o Joan Tardà, por ejemplo), los hechos les desmienten . Solo buenas palabras. En la época reciente quedan para la memoria su posición contra las cuentas de Sánchez, el veto a Iceta como senador o las iniciativas ilegales que siguen tramitando en el Parlamento catalán.

Frente a esto, el PSOE de Sánchez sigue atrapado en el doble juego. Distancias dialécticas, pero gestos y pactos para acercarse a ERC. Estos días, mientras el candidato Sánchez insiste en que está dispuesto a dialogar con los independentistas, a los que pide primero situarse dentro de la ley, esconde u olvida los pactos cerrados que el PSC tiene firmados con ERC en diversos municipios de Cataluña, así como su elección en Navarra, donde prefierió a los independentistas que a UPN, el PP y Cs.

En Badalona, Castelldefels, Figueras, San Cugat del Vallés, Abrera, Cabrera de Mar, Maçanet de la Selva, Playa de Aro, Tárrega, Altafulla... socialistas e independentistas de ERC (en algunas poblaciones con JpC incluido) pactan gobiernos locales sin ningún rubor. En Cataluña, el socialismo de Sánchez ha elegido. Prefiere a ERC. En el Congreso es el pacto de necesidad.