Sánchez no ha hablado con Belarra tras el choque por el envío de armas: «España va a estar donde debe estar»
El presidente considera imprescindible una «unidad» nacional que «trasciende la dinámica interna de nuestro socio»
Qué implica para España estar en la lista de países y territorios «hostiles» de Rusia
Sigue en directo la última hora de la guerra en Ucrania
Las decisiones del Gobierno en el marco de la respuesta a la invasión rusa de Ucrania no seguirán la lógica del equilibrio interno de los socios de coalición. Tras un primer compromiso con Unidas Podemos para evitar el envío de armamento de forma bilateral a Ucrania, el presidente del Gobierno decidió rectificar su postura. Provocando con ello un profundo malestar en Podemos.
Pedro Sánchez no ha hablado personalmente con la secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra , desde que cambiase su criterio hace una semana. Sí lo ha hecho con la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz , y ayer mismo con la ministra de Igualdad, Irene Montero , con motivo del acto institucional por el 8-M.
La sensación que tienen en La Moncloa es que Podemos ha rebajado su nivel de crítica desde que el domingo Belarra señalase como «partidos de la guerra» a todos aquellos que deciden enviar armas a Ucrania. La intención de los socialistas es rebajar esas polémicas y en ningún caso provocar la ruptura de la coalición.
Hoy, durante su viaje a Letonia para visitar las tropas de la OTAN desplegadas cerca de la frontera rusa, el presidente del Gobierno ha reconocido que « la evolución de los acontecimientos me lleva a tomar esta decisión de enviar armas» tras constatar que había discrepancias, esencialmente con el Partido Popular, a este respecto: «Vamos adoptando la respuesta a Vladimir Putin», ha dicho. Se apunta también a que en el corto plazo los países de la UE pueden imponer más sanciones a Rusia.
Aunque Sánchez sigue defendiendo que la respuesta europea es lo más conveniente , también en lo relativo al envío de armas, presenta ese cambio de postura personal como ejemplo de que se trata de un conflicto complejo que «evoluciona día a día», cuyo final no se atreve a atisbar, y que va a tener importantes consecuencias económicas. Por eso el presidente ha trasladado, en conversación con la prensa en este viaje, que las discrepancias con Unidas Podemos y las que se viven dentro del propio conglomerado morado no pueden afectar a la acción del Ejecutivo: «La unidad es importante frente a lo que tenemos delante. Trasciende de la dinámica interna de nuestro socio de coalición».
A su socio sí le manda el mensaje de que entiende que la sociedad española comparte la apuesta por reforzar tanto la alianza europea como la atlántica en el marco de la UE y la OTAN . Y los emplaza a diferenciar entre el agresor y el agredido, planteando que el lema de «No a la guerra» debe expresarse hoy siendo contundentes en la respuesta a Putin: «España está unida en el no a la guerra y en calificar esta guerra como injusta e ilegítima».
Noticias relacionadas