CONGRESO DE LOS DIPUTADOS
El «préstamo» de diputados, una práctica pendiente de regular
El Reglamento del Congreso no recoge ninguna disposición para limitar el préstamo de diputados entre partidos
El táctica del préstamo de diputados entre partidos para permitir que formaciones más pequeñas puedan crear grupo parlamentario cuando no alcanzan el mínimo de escaños exigidos, está pendiente de regular. El Reglamento del Congreso no recoge disposición alguna al respecto de manera que los partidos pueden prestarse entre sí todos los diputados que consideren adecuado para su estrategia política.
Lo más usual, es prestarse diputados entre formaciones políticamente afines, para lograr más visibilidad en una postura política. Pero el ejemplo más criticado estos días ha sido el préstamo del PSOE en el Senado a las formaciones catalanas independentistas Democracia i Libertad (la antigua Convergencia) y ERC para que puedan formar grupo parlamentario en la Cámara Alta, pese a que Ferraz ha declarado estar en contra de la secesión de Cataluña.
Formar grupo supone acceder a presupuesto, portavoces y tiempo de interpelación propios por lo que ningún partido quiere renunciar a ello, si puede evitarlo. No formar grupo parlamentario supone quedar integrado en el Grupo Mixto donde el presupuesto, los portavoces y el tiempo de interpelación son compartidos . El único límite que el Reglamento impone de manera indirecta al préstamo de diputados son las tres condiciones que marca a la hora de formar grupo parlamentario.
Esto es, el préstamo de diputados entre partidos debe permitir alcanzar un mínimo de quince diputados o, al menos, cinco escaños siempre y cuando sumen el quince por ciento de los votos correspondientes a las circunscripciones en que hubieren presentado candidatura o el cinco por ciento de los votos emitidos en el conjunto de la nación. Asimismo, será necesario que la cesión de diputados se realice entre formaciones políticas que se hayan enfrentado ante el electorado.
Podemos también está barajando esta opción para intentar conseguir dividirse en cuatro grupos parlamentarios pese a que el Reglamento del Congreso y las otras tres grandes formaciones -PP, PSOE y Ciudadanos- ya han advertido que no lo aprobarán . Una vez acabado el plazo, los partidos que no tengan asignado grupo parlamentario pasan a quedar integrados en el Grupo Mixto, pero tienen posibilidad de recurrir ante la Mesa y pedirle que reconsidere su decisión tras escuchar a la Junta de Portavoces y tras solicitar un informe jurídico a los letrados de la Cámara baja.
A primeros de la semana que viene la Mesa volverá a reunirse para emitir su dictamen definitivo y de manera extraordinaria comenzará el plazo de gracia de tres días, concedido por el presidente del Congreso, Patxi López, a los partidos antes de adjudicar al Grupo Mixto a aquellos que no hayan logrado formar grupo. Se trata de una «segunda oportunidad» para que Podemos, que ya ha dicho que va a mantener su petición de dividirse en cuatro grupos hasta el último minuto, pueda repensar su estrategia.
Noticias relacionadas
- El PSOE quiere que los diputados no puedan cobrar por otra actividad
- Condiciones, límites y ventajas de formar grupo en el Congreso
- El recurso contra el grupo de ERC que el PP perdió ante el Constitucional
- Podemos integrará en su grupo a las confluencias si el Congreso no les deja formar cuatro independientes