El PP espera «gestos hostiles» de Vox, pero no ve peligrar los pactos

Los populares acusan a Abascal de dañar al centro-derecha con su veto a Ciudadanos

Casado y Álvarez de Toledo, el lunes en el Congreso EP

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La tensión entre el PP y Vox subió ayer de nivel cuando los de Abascal amenazaron con no apoyar los Presupuestos allí donde los populares y Ciudadanos gobiernan con sus votos, como en Murcia o en Madrid. Fuentes populares creen que esa amenaza no es más que «palabrería», pues a Vox le costaría mucho justificar ante su electorado que dinamita un gobierno de centro-derecha, mientras la izquierda se frota las manos.

Desde la dirección nacional del PP, Pablo Montesinos puso como ejemplo el acuerdo de Gobierno que su partido tiene en Andalucía con Ciudadanos, gracias a los votos de Vox . «El pacto goza de un extraordinario estado de salud, y si Vox quiere poner en riesgo todo lo conseguido, será responsabilidad exclusivamente suya y deberá rendir cuentas a los ciudadanos», avisó.

Por parte del PP, no hay ningún motivo para que Vox amenace ahora con romper los acuerdos que firmó con los populares y con Ciudadanos en comunidades y ayuntamientos, y que permitió gobiernos de centro-derecha a lo largo y ancho de España. En todo caso, si el partido de Abascal opta por rechazar ahora los Presupuestos y poner en juego la estabilidad en Murcia o en Madrid o en otras muchas instituciones, el PP le apuntará como responsable y colaborador de los intereses de la izquierda.

Victimismo

Ante esa posibilidad, Pablo Casado preguntó a Vox si su intención es pactar ahora con Podemos y el PSOE . Si es así, dijo, «es algo que interesará a sus votantes conocer». Por eso, los populares no creen que Vox cometa ese error, aunque sí esperan algún «gesto» hostil por su parte para que se visualice su malestar y explotar su «victimismo». El gesto bien podría ser llevar la negociación presupuestaria al límite, pero sin llegar a rematar, o vetar algún punto concreto para que se vea su poder de decisión.

El PP cree que Vox se retrató el pasado martes, en el reparto de los nueve miembros de la Mesa del Congreso. Casado había ofrecido un pacto a Ciudadanos y Vox, para que el centro-derecha pudiera tener cuatro puestos: dos para el PP, uno para Ciudadanos y otro para Vox. Pero la formación de Abascal lo rechazó de plano y vetó la candidatura de Ciudadanos. En cambio, pidió al PP, sin éxito, que le prestara votos para tener ellos un puesto más. Al final, el centro-derecha se quedó con tres, en vez de cuatro, y la izquierda con seis.

«No nos vamos a callar ante Vox . Ha tejido un cordón sanitario a Ciudadanos, una formación de centro-derecha y constitucionalista, y ha preferido beneficiar a Podemos», señalan fuentes del PP.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación