La Moncloa y la Generalitat, al gato y al ratón con la llamada de Sánchez a Torra
El presidente de la Generalitat quiere ser el que inicie las rondas telefónicas con el dirigente socialista, que ha decidido hablar primero con el lendakari Urkullu, según el «orden protocolario habitual»
La oficina del presidente del Gobierno en funciones y candidato a la investidura, Pedro Sánchez , se ha puesto en contacto este viernes con la oficina del presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra , para cerrar la llamada que el primero hará al segundo el martes. Desde el Gobierno autonómico han trasladado al Ejecutivo central que la llamada tiene que ser a las ocho de la mañana, pero La Moncloa se niega porque Sánchez hablará primero con el lendakari Iñigo Urkullu , con quien ha cerrado la cita a las diez del mismo día.
La Moncloa ha contactado con la oficina del presidente de la Generalitat para cerrar la cita telefónica entre Sánchez y Torra. Sin embargo, y según informa EP, en su empeño por ser el primero en hablar con el jefe del Gobierno central, el equipo de Torra ha indicado al de Sánchez que la llamada solo puede ser a las ocho de la mañana del martes, «dada la agenda del presidente» catalán.
Para ese día está prevista también, pero a las diez de la mañana, la llamada al lendakari Iñigo Urkullu. Como indicó ayer Sánchez en Bruselas, los contactos telefónicos se producirían en el «orden protocolario habitual» . Esto implica hablar primero con el jefe del Gobierno vasco, luego el catalán y, después, el resto de responsables autonómicos. Por ese motivo, y según ha podido saber ABC, La Moncloa ha dicho no a la propuesta del equipo de Torra.
Esta llamada se engloba en la ronda de contactos que el presidente del Gobierno en funciones anunció que realizaría tras confirmarse que el Rey le proponía como candidato a la investidura. Las críticas a Sánchez no han tardado en llegar, acusándole de usar a los presidentes autonómicos como comparsa para justificar una llamada a Torra . El líder socialista también anunció que hablaría con todos los partidos políticos, incluido Vox, a pesar de que intentó promover un «cordón sanitario» contra la formación de Santiago Abascal. Desde ese partido ya han dicho que no hablarán con Sánchez.
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